El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que no “declarará la guerra” al Poder Judicial de la Federación y que quien sea elegido como nuevo presidente o presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación será reconocido.
En una nueva defensa de la ministra Yasmín Esquivel Mossa, dijo que “pobre abogada, toda una guerra de potentados, medios de información, columnistas, intelectuales del régimen, vendidos y alquilados. Una lanzada contra la señora”.
Rechazó tener injerencia en el Poder Judicial de la Federación porque “no somos iguales, no se puede gobernar México sin autoridad moral”.
Ratificó que los conservadores, los “los del antiguo régimen” quieren de ministro presidente de la Corte“ al más rico” y acusó a los medios porque “no dicen nada”.
Más adelante lamentó que de los cuatro ministros que propuso para la Corte, dos le dieron la espalda. Confía en que haya ministros “no incondicionales”, sino que defiendan el proyecto de transformación y que no defiendan al antiguo régimen.
