¿Qué más Inventará?…

Punto de Vista

Por Jesús Michel Narváez

Su especialidad es manipular. Cambiar la narrativa. Ser víctima y no victimario. Mostrar temor cuando le es imposible imponer su verdad. Miedo al “qué dirán” y susto ante la realidad.

Primero brindó solidaridad. Después lanzó sus obuses. La pólvora estaba mojada. Luego, entonces, comenzó a cavilar. Y encontró, en momentos de improvisación, que el atentado podría provenir de los criminales, molestos por un reportaje difundido hace “tres o cuatro días”. Después, halló otro elemento: los conservadores buscan desestabilizar mi gobierno. Y finalmente la lotería: no descartó que haya sido un autoatentado.

Textualmente señaló: “… pudo ser un autoatentado” el ataque a Ciro Gómez Leyva, “no porque él se lo haya hecho fabricado, sino porque alguien lo hizo para afectarnos a nosotros”. ‘Y si lo gestó desde su cama juarista?

Autoatentado significa provocado para sí mismo. Si no lo hizo Ciro, no es autoatentado. Es simple y llanamente “atentado” porque no se consumó el objetivo y que no era otro el de asesinarlo. Habría sido, entonces, homicidio doloso. De esos que niega vayan en aumento y que presume se han reducido en su gobierno, cuando la suma alcanza los 147 mil en 4 años.

Un “todo poderoso” muestra el miedo. Y exhibe que los ángeles de la guarda que lo cuidan, los integrantes del “pueblo bueno”, no tienen la capacidad de defenderlo de sus atrocidades, mentiras, engañifas.

Su temor lo demuestran sus palabras: “No es un asunto menor, quisieron asesinarlo o intentaron hacerlo y si no fue así, el propósito era generar un conflicto mayor: desestabilizar al país, que eso también es un crimen”, afirmó el nada pobre que habita en el virreinal Palacio que albergó a Hernán Cortés, el mismo que realizó la conquista con “la espada y la cruz” por lo cual “exigió” una disculpa a la Corona de España y es momento en que ni siquiera abren sus cartita, a pesar de que Santa Claus está por arribar. Y en Palacio sí hay chimeneas.

El intento de matar a un comunicador influyente ¿desestabiliza su poderoso gobierno?

Entonces no es tan poderoso. Quizá sin el respaldo de las fuerzas castrenses, de la que es Comandante Supremo por decisión del Poder Legislativo para frenar las ambiciones militares de alcanzar más presencia y fuerza de la que poseen, sería un cero a la izquierda. Todos y cada uno de los autócratas se rodean de la milicia para después convertirse en dictadores. Es la regla y el personaje en cuestión no la rompe, la fortifica.

Lo he escrito en repetidas ocasiones y lo seguiré haciendo: el papel de un Jefe de Estado, que para desgracia del país y de los mexicanos carecemos de él, tiene como primigenia responsabilidad velar por la paz, buscar el bienestar, unificar a sus gobernados e impulsar la democracia, las libertades de pensar, actuar, ser diferentes entre sí.

La unanimidad solamente la consiguen los dictadores. A punta, eso sí, de balazos y no abrazos.

¿Qué más va a inventar para salvaguardar el trasero y desdeñar el atentado en contra del periodista?

Mostrar temor, implica necesariamente, que es débil. 

Y la gruesa piel de lagarto viejo, ya no resiste la crítica. Quiere ser dios -con minúscula- sin tener los atributos. Busca enlodar a todos para mostrar que su plumaje no se mancha al cruzar los pantanos. Y tendrá razón: no tiene plumaje, sino escamas.

Con sus declaraciones de fin de semana y del inicio de esta, confirma que es un ídolo de barro.

Ni más, ni menos. Polvo es y en polvo se convertirá.

La atención psiquiátrica es urgente. A la voz de YA.

E-mail: jesusmichelmp@htmail.com, jesusmichelnarvaez266@gmail.com, Facebook Jesus Michel, Twitter @msionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada.

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