Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Una de las máximas vigentes dice: en política nunca hay coincidencias.
Es difícil creer que la reactivación del juicio de Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI y presidente de la Comisión de Gobernación de Gobernación, anunciado por el coordinador de la bancada de Morena, no tenga fines intimidatorios por la postura, a lo mejor de dientes para afuera, de que la bancada tricolor no apoyará la reforma electoral del presidente López.
Si bien el Plan B presidencial está en marcha y es probable que hoy anuncie el huésped temporal de Palacio Nacional el envío de la nueva iniciativa que propone reformar 7 leyes en materia electoral, la indigestión prevalece y echar mano de toda argucia para lograr su propósito, no está vedada.
Está claro que los 223 diputados de oposición más algunos del PVEM, del PT y del mismísimo partido dominante, votarán en contra de la iniciativa que busca resquebrajar el sistema electoral de México. De darse la situación, siempre y cuando el próximo martes suba al pleno, correría la misma suerte que la reforma de la industria eléctrica: ser desechada.
“Desechar” significa que no podrá volverse a presentar en los mismos términos.
Y eso no le gusta al jefe de la banda, quien en reiteradas ocasiones ha señalado que se necesita que el Presidente en turno tenga el poder para reformar la Constitución en tratándose de asuntos que beneficien al pueblo.
Lo hizo hace dos días, cuando obligado por la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, tuvo que anunciar que enviará la terna –deben ser dos- de personas que podrían ocupar las vacantes en la Comisión Federal de Competencia Económica. Se dolió no tener el poder para desaparecer organismos que solamente protegen los intereses de los conservadores en lugar de apoyar a las empresas del Estado. Es decir, Pemex y CFE.
Yo no estoy de acuerdo, espetó en su cotidiano monólogo, pero hay que cumplir el mandato judicial.
Por ello, Ignacio Mier retrasó una semana la presentación de la iniciativa presidencial en el ánimo de convencer a “unos cuantos diputados de oposición” de votar a favor de lo que quiere el presidente.
El fin de semana pasado, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, sorprendió a propios y adversarios, dar a conocer que se posponía por una semana la presentación de la iniciativa.
No debe dudarse ni por un momento, que atiende órdenes presidenciales y, además, del jefe del partido. Sabe y bien –requetebién, diría YSQ- que el mando superior no permite ser ignorado en sus deseos y mucho menos rebeliones.
Ya lo dijo también: no me gustan las rebeliones.
La declaración de Mier, producida ayer, llama la atención por los tiempos políticos que se viven. Y si bien el reglamento cameral prevé tiempos definidos para sesionar y dictaminar casos de desafuero, es necesario el diputado Mier explique porque hay docenas de solicitudes que no han sido atendidas y duermen el sueño de los justos.
Nada bueno preludia la reactivación de la Sección Instructora. Podría convertirse en bumerang para futuras necesidades políticas.
El presidente y Morena presumen que con los votos que cuentan junto con sus aliados, logran la mayoría simple y sus votos pueden cambiar las leyes que les venga en gana sabiendo, incluso, que violentan la Constitución y serán objeto de controversias constitucionales.
Cuentan con que la Suprema Corte de Justicia de la Nación tarde en resolver el tema más allá de las elecciones de 2023 y, en un “olvido intencional” hasta las de 2024.
¿Se doblará Alejandro Moreno y colocará en primer lugar su persona y familia antes de responder por la Patria?
Es pregunta, no afirmación.
E-mail: jesusmichelmp@hotmail.com, jesusmichelnarvaez266@gmail.com, Facebook: Jesus Michel, Twitter: @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el m760 de amplitud Modulada.
