Los Privilegios del Poder
VERÓNICA V. GONZÁLEZ Y ARNOLDO PIÑÓN
El presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida, es, desafortunadamente, el último líder histórico vigente de lo que hace unos años fue el pujante movimiento obrero organizado del país.
Con la desaparición de Agustín Rodríguez Fuentes, el pasado 22 de febrero y quien durante 28 años dirigió el Sindicato de Trabajadores de la UNAM (STUNAM), convirtiéndolo en un referente por el contrato colectivo de trabajo que logró, con prestaciones económicas que les permiten ingresos por encima de los que en el país se pagan en promedio, se fue otro referente.
Esos líderes tenían la sensibilidad para conocer los mecanismos a los que debían recurrir para obtener resultados que beneficiaran a los trabajadores. Fueron ellos los que lograron instituciones fundamentales como el IMSS, INFONAVIT, ISSSTE y FOVISSSTE, para mencionar sólo cuatro de las más importantes.
En su gestión al frente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Ayala Almeida ha dado muestras no sólo de esa sensibilidad, sino incluso capacidad para adaptarse al devenir del mundo laboral en el país: en mayo de 1999, con establecimiento de la jurisprudencia en torno a la libertad sindical en el sindicalismo del sector público, hubo quienes pronosticaron la pulverización. No solo no se cumplió esa fatalidad, sino incluso los controladores aéreos, con Alfredo Covarrubias Aguilar y Ángel Iturbe, militan en la actualidad en esa central.
El hecho que el Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (SINACTA), se hubiesen incorporado a la FSTSE, tiene varias lecturas: fueron ellos los que con la asesoría jurídica del abogado Alejandro Velázquez fueron los primeros en obtener el reconocimiento legal del gobierno federal, pese a que el entonces artículo 68 de la ley burocrática establecía que en cada dependencia pública solo podía existir un sindicato; y además, cobró la factura pendiente que tenía con Víctor Bernardo López Carranza, dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de (ahora Infraestructura), Comunicaciones y Transportes.
Los controladores aéreos y el licenciado Velázquez Méndez, fueron todavía más allá, al lograr que con una sentencia de amparo favorable a su pretensión, la Suprema Corte de justicia de la Nación declarara inconstitucional el artículo 72 de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado (LFTSE) que sujetaba a tres año la gestión de los den regentes sindicales en las dependencias públicas.
En ese entonces -conclusión del gobierno del presidente Ernesto Zedillo-, Ayala Almeida aprovechó la negativa para pagar un bono sexenal a los trabajadores de base, para sentar las bases de lo que es hoy una de las prestaciones económicas más valoradas por los trabajadores gubernamentales: el bono de navidad que se les entrega en vales aceptados por la mayoría de los comercios y que aumenta cada año.
Esa prestación es independiente del aguinaldo anual, por lo que los trabajadores tienen lo necesario para disfrutar de una muy aceptable navidad en compañía de sus familias y hacer frente a la temida cuesta de enero -en los primeros días de ese mes reciben la segunda parte de esa prestación-.
El presidente de la FSTSE fue sensible a la necesidad de reformar al ISSSTE, y se sumó -después de haber sido él quien hizo la primera iniciativa de ley-, sin que ello implicara afectación en las prestaciones que recibían los trabajadores, al entender que el sistema de jubilaciones o se modificaba sustancialmente o se acababa el instituto.
De haberse mantenido la obligatoriedad que el Estado en el pago de las pensiones de los trabajadores, el ISSSTE ara hablar solo de ese instituto- desde hace tiempo hubiese quebrado frente a la insuficiencia presupuestal para hacer frente a la creciente necesidad de recursos.
Ayala Almeida forma parte de líderes de la talla de Fidel Velázquez y Antonio J. Hernández -para citar a dos de los más representativos-. En ese grupo se encontraba Agustín Rodríguez Fuentes, quien en visión superó a Evaristo Pérez Arreola.
En las actuales circunstancias del mundo y del país en particular, a los trabajadores mucho ayudaría que hubiese otros Joel Ayala o Agustín Rodríguez.
PARA LA AGENDA
¿Con el apretado triunfo de Sofía Hernández Labra -con solo 11 votos de diferencia- en la sección 39 del SUTGCDMX, José Antonio Xochicale cree haber obtenido impunidad para no rendir cuentas de los 15 millones de pesos que no entregó a la sección 12 «Servicios médicos? Seguramente no… El 1o de octubre, en la celebración del Día del Trabajador del ISSSTE -en un acto realizado en el deportivo del SNTISSSTE-, la doctora Norma Liliana Rodríguez Argüelles ratificó que se audita el manejo del multimillonario fondo de la comisión de auxilios que los últimos cinco años hicieron Francisco García Culebro y su hijo Erick Arturo García Salamanca Varela -tesorero y presidente entre 2017 y 2022- y en el que se estima existe un faltante del orden de lo 250 millones de pesos. La auditoría se ha extendido por más de tres meses -en el primer pleno de su gestión, la doctora Rodríguez Argüelles dio a conocer que ya se realizaban los trabajos-, ¿no es demasiado tiempo para una revisión de esas características…?