RAÚL MONDRAGÓN VON BERTRAB
“El Senado romano funcionaba como órgano de consulta de los magistrados de Roma y estaba compuesto por los funcionarios públicos más experimentados de la ciudad y la élite de la sociedad. Sus decisiones tenían un gran peso, aunque no siempre se convirtieran en leyes en la práctica. El Senado siguió ejerciendo su influencia en el gobierno en la época imperial, aunque en menor medida.
“Con el paso del tiempo, el Senado fue testigo de un aumento de la intervención del ejército en la política y sufrió la manipulación tanto de sus miembros como de sus sesiones por parte de los sucesivos emperadores. La institución sobrevivió a todos los emperadores, y los senadores siguieron siendo los actores políticos más poderosos de Roma, ocuparon cargos públicos clave, influyeron en la opinión pública, comandaron legiones y gobernaron provincias.””
-Mark Cartwright, historiador.
La percepción es la madre de las ideas y México, con canciller o no, se percibe ausente de la Novena Cumbre de las Américas que los Estados Unidos presiden en Los Ángeles del 6 al 10 de junio. El lema de la reunión regional: “Construyendo un futuro sostenible, resiliente y equitativo” para el hemisferio. La relevancia del evento es innegable:
Al ser la única reunión hemisférica de líderes de los países de las Américas, la Cumbre constituye el foro más importante para abordar los desafíos y las oportunidades que comparte nuestra región.
Nada más, nada menos. El trazo de la ruta colectiva hemisférica hacia el futuro. Pero nuestro presidente decidió no asistir. Abogó por Cuba, Venezuela y Nicaragua, que no estaban invitados. Condicionó su presencia a que lo fueran y la tiranía, la dictadura y el narcoestado lo dejaron mal parado pues aclararon que de ser invitados de última hora desairarían al anfitrión imperialista. Abogado pues, de causas perdidas.
Lo que no se perdió fue el gesto sospechoso, pues Marco Rubio, senador estadounidense por el Estado de Florida, celebró que un presidente que ha entregado parte de un país al crimen organizado y es apologista de las antidemocracias antes mencionadas, no estuviese esta semana en suelo americano.
En su onerosa y monótona mañanera, AMLO respondió a Rubio incluyendo en el pleito a Ted Cruz, otro senador de EE.UU., acusándolos de recibir donaciones de la Asociación Nacional del Rifle y exigiéndoles pruebas de sus dichos. No conforme con enfrentar a un senador de allá, donde el cargo ostenta un poder similar al de algunos presidentes de naciones menores, el mexicano incómodo abrió otro frente, que ahora y como era de esperarse -pero en esta administración la planeación estratégica brilla igual, por su ausencia- se ha multiplicado: 15 diputados del vecino del norte, incluyendo una congresista de la ultraizquierda, denunciaron ante su Departamento de Estado y ante la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), el terrible clima contra la libertad de prensa en México y los ataques de nuestro desatinado mandatario contra los periodistas.
Rubio, adalid de la lucha del lobby cubano en Miami contra la dictadura cubana, respondió ya en este ping pong de alto nivel y señaló a un presidente que tiene “palabras duras” para líderes electos democráticamente, pero elogios para un dictador, un narcotraficante y una tiranía marxista.
Esto no es menor. Por más que se pataleé desde Palacio y que el Embajador Salazar minimice el intercambio, el gobierno mexicano saldrá manchado de la Cumbre. El pasante Ebrard fue a repetir las necedades comunistoides del jefe y salvo que trabaje mucho tras bambalinas y, parafraseando a Díaz Mirón, cruce el pantano sin manchar su delicado plumaje, puede salir quemado.
Se pierde otra oportunidad, se golpea una vez más a las generaciones que vienen. ‘Como presidente y anfitrión -Estados Unidos ofreció- trabajar con las partes interesadas de la región para asegurar compromisos a nivel de líderes y acciones concretas que mejoren drásticamente la respuesta y la resiliencia ante la pandemia, fomenten una recuperación ecológica y equitativa, construyan democracias fuertes e inclusivas y aborden las causas fundamentales de la migración irregular.” La agenda compartida. Los problemas nuestros, postergados otra vez.
Ningún compromiso de campaña o adefesio ideológico retrógrado son más importantes que la viabilidad de la Nación Mexicana y esta viabilidad, en un mundo imperial polarizado, pasa por y depende de la relación con la potencia vecina. Es Teoría Política 101.
El Senado en Roma fue la institución máxima y fuente de orientación y consulta para la magistratura romana. El Senador Romano tenía autoridad, sobre todo, moral. En Estados Unidos, los “Padres Fundadores” dieron al Senado rango constitucional y un papel central en la división e independencia de los poderes. El Senador Americano tiene estatura de estadista, poder de hecho y de derecho. Acabo de estar en el Senado de la República y con un senador. Lo nuestro es un mercado de gestores de favores y favoritismos, donde hasta las más nobles intenciones se supeditan a la barbarie que Vasconcelos tanto denunció.
Por el bien de México, esta no se la van a perdonar.