Previo a la Jornada Mundial del Pobre, iniciativa promovida por el papa Francisco, la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS) de la Conferencia del Episcopado Mexicano, el cardenal Felipe Arizmendi Esquivel y el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), coincidieron en que debido a que la pandemia incrementó los niveles de precariedad económica, el desempleo y las condiciones sociales y salud, es urgente la solidaridad con los sectores afectados, sobre todo de acciones que vayan más allá de lo asistencial.
La CEPS indicó en un documento que “se ha agudizado el escenario de pobreza en este primer cuarto del presente siglo, por lo que los objetivos que se tenían para este inicio del siglo XXI se han alterado o modificado, principalmente a causa de los efectos de la pandemia del Covid-19”.
Detalló que la pobreza multidimensional afecta a mil 300 millones de personas. Cerca de la mitad, unos 644 millones, son menores de 18 años y alrededor del 85 por ciento viven en el África subsahariana y en el sur de Asia.
Aparte Arizmendi Esquivel señaló que en dicha jornada (14 de noviembre) se busca “remover las conciencias”, y añadió que las actividades que se realizarán dependerán de cada diócesis. “El papa recomienda que no nos quedemos en lo meramente asistencial, que veamos qué podemos hacer más formalmente, como acciones comunitarias de apoyo para promover el trabajo para que salgan adelante, y no nos limitemos a dar una limosna ocasional”.
Señaló a La Jornada que ante el aumento de la pobreza, derivado del SARS-CoV-2 la solidaridad es fundamental y añadió que aunque, por ahora, pareciera que lo peor de la crisis quedó atrás, mucha gente aún no recupera su estándar de vida pre pandemia.
El Celam indicó que la pandemia ha provocado un alza en los niveles de pobreza “sin precedentes en las últimas décadas” y ha acrecentado la desigualdad y el desempleo, y en el caso de América Latina y el Caribe, considerada la región con la mayor desigualdad social, el coronavirus empeoró esa situación. “La CEPAL calcula que el total de personas pobres ascendió a 209 millones a finales del año (2020), eso significa 22 millones de pobres más que en 2019. Son ellos, hombres y mujeres viviendo en pobreza y en pobreza extrema, quienes están afectados por la falta de empleo e ingresos”.
La CEPS añadió que “la situación de la pobreza en México quedó claramente expuesta” en el informe del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social. “Este organismo independiente estima que entre 8.9 y 9.8 millones de nuestros habitantes han caído en pobreza debido a la disminución de sus ingresos”.