Ante los pobres resultados en materia de contención de homicidios dolosos, el presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que el fiscal de Guanajuato, quien ostenta el cargo desde hace 12 años, debe ser cambiado.
Carlos Zamarripa Aguirre es el actual fiscal de Guanajuato y ocupa el cargo desde 2009 y tiene ante sí 6 años más al frente de la Fiscalía General de Justicia de la entidad, es decir, estará 19 años.
El mandatario reconoció que la violencia en dicho estado no ha podido contenerse desde hace años, por lo que se debe evaluar la continuidad de las autoridades de seguridad que tienen a su cargo garantizar la paz en la entidad.
“Guanajuato es de los estados con más violencia desde hace ya bastante tiempo y no es posible que no haya ninguna mejora, sobretodo en caso de homicidios y lleve 12 años el procurador de Guanajuato, no es posible”, reprochó el mandatario federal en su conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
“Debe de renovarse en Guanajuato, es mi opinión respetuosa de la soberanía del Estado, a las instituciones encargadas de garantizar la paz y tranquilidad de los habitantes del estado, es evidente que no hay buenos resultados”, puntualizó.
López Obrador consideró que la ampliación de los mandatos de los fiscales estatales fue una maniobra de los gobiernos locales para afianzar la impunidad, por lo que llamó a hacer una revisión a las legislaciones estatales en la materia.
“Ojalá el gobernador actúe y tome decisiones y el gobierno no puede estar secuestrado por facciones, por intereses de grupo, nada de que una secta es la que domina y los jefes de esa secta tienen privilegios”, sostuvo.
De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública, el día de ayer se cometieron 10 homicidios en Guanajuato, con lo que la entidad se colocó como la segunda con más violencia después del Estado de México, que ayer registró 11 homicidios dolosos.
“Esto es de todos los días, estamos hablando del 15% de los homicidios del país”, advirtió López Obrador.