*Descarrilar al Candidato del PRI-PRD, la Meta de la FEDE
*Los Pobres son más Pobres y dicen Adiós a la Canasta Básica
*El Presidente: Delincuente Confeso… y Sigue tan Campante
Por Joel Armendáriz
Distraer la atención de temas que afectan a todos sin excepción, no es tarea fácil.
Sin embargo, en Palacio Nacional conocen todos los vericuetos para engañar con mentiras y tapar el sol con un dedo.
La inflación cabalga en caballo de hacienda -y no precisamente de la Secretaría- y las medidas anticíclicas no se advierten por ningún lado.
Haber llegado a 6.8 -anualizada- en mayo, es un rango que no se veía ni sentía desde hace 21 años. Los mismos en los que gobernaron los neoliberales, conservadores y “traidores a la patria”. Hoy que vivimos la “intrasformación”, de nueva cuenta los menos favorecidos, es decir, los más pobres, aquellos que no tienen servicios de salud, carecen de agua potable, no conocen una casa propia, usan zapatos recolectados de la basura, comen, cuando lo hace, una vez al día, son los que más padecen. Ellos, los pobres que dejaron de ser primero al ser sustituidos por el Tren Maya, la Refinería Dos Bocas, el Aeropuerto Felipe Ángeles y el Corredor Transísmico -a cargo de la Marina y en el que no podrán invertir los extranjeros y pocos nacionales tendrán oportunidad de hacerlo (dixit López Obrador)- y que nunca conocieron el contenido completo de una canasta básica, hoy están más hundidos que la mole de hierro y concreto que se construye en Paraíso, Tabasco.
No son los únicos. Los aún desempleados a causa de la pandemia, han vendido hasta el alma a Belcebú y no alcanzan la alimentación estimada en la canasta. Tanto el INEGI como el Coneval han dado las cifras y el incremento de pobres se calcula en 10 millones de personas.
Para el Banco de México, responsable de controlar la inflación y la paridad del peso frente al dólar, se agudiza la situación y aunque considera que el incremento de precios que pauperiza el poder adquisitivo es “temporal”, todo indica que seguirá subiendo mientras los combustibles y la energía eléctrica lo hagan.
Los precios de pollo, carne, huevo, frutas y legumbres, leche y tortillas, entre otros productos de consumo cotidiano, se aumentaron notablemente a inicio de mayo. El Banxico emitió opinión sobre el particular y consignó que gasolinas, diésel, gas y luz han sido los percutores del disparo.
Y aunque las cifras son oficiales y las admite la Secretaría de Hacienda, las confirma Banxico e Inegi, el gobierno federal mantiene su política económica sin cambio alguno. No impulsa créditos blandos que podrían provenir de la casi inexistente Banca de Desarrollo y el sistema financiero privado presiona a los deudores a través de despachos de cobranza. La morosidad de deudores es cada vez mayor y la cancelación de tarjetas de crédito se ha multiplicas, lo que se refleja en las compras domésticas.
LA INFLACIÓN NO IMPORTA
Los bolsillos, las carteras, están horadadas. Por los agujeros se escurre el dinero y no parece importarle al Gobierno.
Fuentes extraoficiales y opiniones como la del exsecretario de Hacienda, Carlos Urzúa, ponen de relieve que el Gobierno federal se ha quedado sin recursos para cumplir con las obligaciones que le mandata la Constitución y por ello se ha frenado o cuando menos recudido la llegada de vacunas para frenar al Covid-19.
Las obras de infraestructura, que son generadoras de empleos y reparto de riqueza, han caído hasta en 51 por ciento respecto de lo que se invertía en 2018.
A cambio, desde Palacio Nacional se privilegia el proceso electoral y el presidente reconoce su participación, lo que lo convierte en un delincuente confeso.
La semana pasada la atención no fue para las víctimas del metrazo, tampoco para los adultos mayores que no han recibido la segunda dosis y menos para las madres que reclaman la aparición, vivos o muertos, de 13 mil hijos desaparecidos.
No. El tema abordado con elocuencia y perversidad se tejió en torno a dos candidatos opositores al partido oficialista. Adrián de la Garza y Samuel García, aspirantes punteros en el proceso electoral para renovar gobernador en Nuevo León, se convirtieron en el foco de atracción encendido desde Palacio Nacional.
Acusados presuntamente de delitos electorales y financiamiento ilegales, a ambos candidatos, que superan por enorme diferencia a Clara Luz Flores, la abanderada de Morena, se les han abierto carpetas de investigación y la prisa por judicializarlas es patente.
De la Garza, que levanta los colores de del PRI y el PRD, denunció una persecución política por parte del presidente de la República y señaló que la acusación en contra de García es “una simulación”.
García, por su parte, publicó en su cuenta oficial de Twitter: “Estoy convencido de que la única razón detrás de todas las denuncias, ataques y difamaciones que han surgido en las últimas semanas contra mí y mi familia, es que vamos a ganar la gubernatura de Nuevo León”:
¿Y la inflación?
¡Bien, gracias!
Porque en lo económico “vamos requetebién”.
