El partido Morena denunció intimidaciones, amenazas y agresiones a sus aspirantes en municipios del valle de México y del Valle de Toluca y alertó que en la zona sur hay candidatas y candidatos que han sido amenazados para no hacer campaña.
Hizo un enérgico llamado a las autoridades a intervenir y a evitar que pueda registrarse algún tipo de violencia.
El presidente del Consejo Político, Maurilio Hernández González y el delegado de Morena Issac Montoya también señalaron que el INE solo sigue «como una cola» a quienes son candidatos y candidatas de Morena para fiscalizarlos, por lo cual exigieron piso parejo y que sigan a todas y todos los abanderados.
Montoya refirió que han tenido problemas en once ayuntamientos del sur y en otros como Chimalhuacán e Ixtapaluca, con el grupo de Antorcha; mientras en Huixquilucan el alcalde con licencia, Enrique Vargas busca sabotearlos, en Nezahualcóyotl una brigadista embarazada fue agredida, además de San Felipe del Progreso y otros del Valle de Toluca.
En conferencia de prensa advirtieron que la situación más grave está en el sur de la entidad, pues las amenazas han escalado a un impedimento a sus aspirantes y a los de otros partidos para hacer campaña, pero quienes son de la coalición «Va por México» no han tenido problemas.
El tema, dijo el delegado, representa una preocupación y han pedido a las autoridades su intervención, que esas prácticas no se siga sucitando y el acuerdo dentro del pacto recién firmado con el gobierno mexiquense es que habrá un canal directo para resolver las tensiones, por lo cual espera que no quede en letra muerta.
El delegado dijo que hasta el momento han presentado unas diez denuncias, pues solo en Huixquilucan van tres y dos en Chimalhuacán.
Afirmó que hay quienes buscan descarrilar el proceso con casos de intimidación a candidatas y candidatos y ha habido comunicación con el gobierno estatal, por lo cual esperan una respuesta y que tome cartas en el asunto.
Atribuyó los ataques a que les preocupa el crecimiento de Morena, pero en el sur, el tema no ha quedado en amenazas, sino ha escalado a un impedimento para hacer campaña.
La oposición, dijo Maurilio Hernández, ha bajado el nivel de sus campañas y se preparan para el día de la elección, a fin de usar recursos en la compra de votos y buscan tener casas de seguridad para hacerlo, por lo cual llamó a que la competencia sea abierta, transparente y el INE sea estricto en la revisión de esas prácticas y que los acuerdos de la mesa política se concreten para que no queden en letra muerta.
Montoya y Hernández aseguraron que Morena tiene un posicionamiento del 40%, es el único partido en positivo y la oposición está desesperada, por lo cual sus aspirantes sufren hostigamiento.