Por Jesús Michel Narváez
Sorprende el titular de la Unidad Investigación Financiera (UIF) de Hacienda.
Sin previo aviso, defendió a los órganos autónomos.
¿Santiago Nieto se fue por la libre, tiene línea o tiende una cortina de humo?
Como fuere -me inclino por la primera opción-, lo que dijo durante su participación foro virtual: “6 años de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública”, tiene una fortaleza que es imposible dejar en el cajón de los recuerdos.
El tema: la defensa de los órganos autónomos constitucionales.
Doctor en derecho, fue claro y preciso:
“Yo creo que es importante que los órganos autónomos -por supuesto siempre representando la autonomía que establece la Constitución- tenemos que coordinarnos sin que esto sea una afectación a la autonomía, lo hicimos en materia electoral con el INE y ha resultado”.
¡Recórcholis!
“La parte fundamental que yo quisiera plantear es la coordinación interinstitucional, como instituciones del Estado mexicano no podemos poner una posición de enfrentamiento, sino de colaboración institucional».
¡Contrarecórcholis!
“Hay que reconocer que la ley general de transparencia y el INAI, puede ser un poderoso mecanismo de combate a la corrupción, que la cultura de la transparencia y la rendición de cuentas son un mecanismo eficaz para poder concientizar a la sociedad y a la ciudadanía, respecto a la necesidad de interactuar con las instancias del estado y poder obtener información”.
¡Supracotrarecórcholis!
La diferencia con su jefe. El presidente López descalificó al INAI -por enésima ocasión- en su conferencia del 28 de abril, al conocer que el pleno del organismo acordó presentar una acción de inconstitucionalidad contra el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut).
Ahí, desde el púlpito presidencial, comparó al INAI con un “monstruo” y “ogro”. Como remate, confirmó su idea, porque no es de nadie más, de desaparecer a los organismos autónomos. Su razonamiento: no tienen razón de ser.
Nieto Castillo recordó algo fundamental que el presidente ha ignorado, intencionalmente o por desconocimiento.
Dos párrafos lo dicen todo:
“El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales ha ayudado a abrir información importante en los casos de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, en el escándalo de corrupción de Odebrecht, así como en el caso de la Estafa Maestra.
“A pesar de que hubo una primera resolución para no abrir Odebrecht, hay que reconocer que el INAI hizo una resolución muy importante que terminó clarificando y ordenando a la Fiscalía General de la República que se identificara y se hiciera público un mecanismo de corrupción internacional”.
No es cosa menor lo que dijo. Por el contrario, tiene sustento y, algo que no tiene el presidente: respeto por lo que mandata la Constitución respecto de los órganos autónomos que ampara la Carta Magna.
¿Por la libre, con línea o tiende una cortina de humo?
Lo que fuere. Ahí están sus declaraciones. ¿Cómo las tomará su jefe? Vaya usted a saber.
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