Fiscalía y defensa del caso del exsecretario de Seguridad Pública mexicano, Genaro García Luna, ante la justicia de Estados Unidos solicitaron una vez más al juez de la causa, Brian Cogan, aplazar de común acuerdo y por 60 días la audiencia judicial prevista para el próximo 19 de abril, mientras las dos partes siguen trabajando en la revisión y recolección de evidencias.
En una carta dirigida a Cogan, ambas partes insistieron en la dificultad que están teniendo para preparar el caso debido a la pandemia de coronavirus, que afecta a la consecución de pruebas y a los encuentros de la fiscalía del distrito este de Nueva York con potenciales testigos y del abogado de la defensa con el exministro mexicano.
De la misma forma, el gobierno estadounidense está esperando la respuesta de gobiernos extranjeros para que le entreguen la información solicitada sobre el caso, después que hayan hecho las solicitudes pertinentes.
El gobierno informó a las partes que ha entregado “la mayoría” de las pruebas que tiene en su posesión, y que solo espera que de ahora en adelante haya “pequeñas entregas” a medida que reciba nuevos indicios o identifique que tiene más material en su poder, algo que podría producirse en las próximas semanas.
Según la información revelada por la fiscalía, ya se han entregado más de un millón de páginas de documentos y “voluminosas” comunicaciones interceptadas y grabadas. Entre los últimos documentos que se entregaron, más de 32 mil páginas presentadas a principios de marzo, estaban pruebas provenientes de la policía mexicana y panameña, grabaciones de llamadas hechas desde la cárcel y documentos del gobierno mexicano relacionados con un decomiso que se realizó en su país, entre otros.
No es la primera vez que se pide una postergación en este caso: ambas partes ya solicitaron un aplazamiento del que tendría que haber sido su último encuentro, a mediados de febrero, por las mismas razones. De hecho, el redactado de la carta es prácticamente calcado.
“Las partes siguen enfrentándose a retrasos en la preparación del juicio en este caso, a la luz de la pandemia, incluidas las limitaciones en la capacidad del gobierno para reunirse con testigos encarcelados y las limitaciones en la capacidad del abogado defensor para reunirse con el acusado”, se vuelve a leer en la carta.
En ese entonces, la petición fue aceptada sin problema por el juez Cogan. De hacerlo otra vez, la próxima audiencia se programaría a mediados de junio. La última vez que hubo una audiencia judicial de seguimiento del caso fue a finales de diciembre de 2020.
La única disputa entre las partes que sigue sin resolverse es sobre los materiales que la fiscalía quiere mantener “bajo reserva” alegando confidencialidad que podría afectar a la seguridad de testigos cooperantes, algo de lo que César de Castro, el abogado de oficio de García Luna, se quejó el pasado diciembre, cuando respondió que la justificación carecía de sentido porque su defendido “no es El Chapo. No representa riesgo de seguridad para testigo alguno”.
García Luna fue detenido en diciembre de 2019 en Dallas, Texas, y está acusado por tres cargos de narcotráfico y uno más por falsedad de declaración.