La Patrulla Fronteriza de EEUU detiene diariamente en promedio a 5.000 migrantes que han cruzado de manera irregular la frontera desde México, dijo este viernes un funcionario de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
En una teleconferencia con periodistas, el responsable de CBP indicó que de esos 5.000 arrestos diarios, más de 500 corresponden a menores indocumentados que cruzan la frontera sin la compañía de alguno de sus padres o un tutor legal.
Si se mantiene la tendencia, este mes de marzo podría batir la histórica marca registrada en mayo de 2019 cuando, con Donald Trump en el poder, fueron detenidos o considerados inadmisibles para entrar en el país 132.856 extranjeros.
De ese promedio diario, unos 2.300 corresponden a personas que viajan en unidades familiares, que según indicó el funcionario permanecen en el país si llegan con un niño menor de 7 años y no son expulsados como los demás al seguir vigente el llamado Título 42, que permite devolver a México a los extranjeros debido a la pandemia del coronavirus.
«En su mayoría son menores de edad sin compañía de padre, madre o un custodio legal, y hacemos todo lo posible para dar prioridad primero a los niños y luego a las unidades familiares que requieren cuidado especial», señaló el funcionario.
De esos 2.300, unos 1.900 se quedan en el país y, junto con los 500 menores que viajan sin su padre, madre o tutor legal, son trasladados a instalaciones de CBP para posteriormente ser entregados al Departamento de Salud, que se encarga de ellos antes de su liberación en Estados Unidos.
El funcionario de CBP indicó que tienen actualmente bajo su custodia a unos 5.000 menores, aunque espera un incremento en la llegada de migrantes en los meses próximos, tal y como ha sucedido tradicionalmente en la primavera.
«El incremento en los cruces por puertos de entrada o entre ellos no es algo nuevo para nosotros», indicó el funcionario en la conferencia de prensa. «Hemos visto incrementos antes y los habrá hasta los meses de verano».
La misión de la Patrulla Fronteriza es la custodia de las fronteras, añadió, «y no la custodia de migrantes, que deben ser transferidos a otras agencias que tienen esa responsabilidad. Seguimos deteniendo más personas que las que podemos transferir».
El Gobierno del presidente, Joe Biden, está siendo muy criticado por permitir la entrada en el país de familias y menores de edad inmigrantes, al contrario de lo que hacía Trump, lo que está saturando los centros de detención.
Pero Biden se ha defendido diciendo que no van a «dejar morir de hambre» a ningún menor indocumentado.
«Ningún Gobierno estadounidense ha dicho eso antes, excepto Trump. No voy a hacer eso», zanjó.
En este sentido, el funcionario dijo que tratan de «repatriar a tanta gente» como pueden. «Nuestra capacidad para albergar a detenidos es limitada y tenemos el reto de procesar a los niños no acompañados en instalaciones que jamás fueron diseñadas para albergar niños», agregó.
Aproximadamente el 51 % de los migrantes ilegales este año proceden de Honduras, Guatemala y El Salvador, y otros grupos numerosos provienen de Ecuador, Brasil y Cuba.
La composición demográfica de la migración en la frontera sur «es este año muy diferente, y la pandemia de la covid-19 ha añadido una complicación en todo el proceso que requiere ajustes para proteger a los detenidos».