La Fiscalía de Bolivia detalló que tres de los ocho dirigentes universitarios que convocaron a la reunión fueron arrestados y afrontarán cargos por homicidio y lesiones graves, mientras se trata de dar con el resto de los representantes.
Las autoridades bolivianas informaron que los fallecidos son siete estudiantes, mientras que los cuatro heridos tienen lesiones graves, todos entre los 18 y 27 años.
La investigación determinó que una pugna entre dos frentes se produjo tras la asamblea convocada en un patio de la universidad y que se trasladó hasta las oficinas de una de las carreras de la facultad financiera en un cuarto piso en el que hubo forcejeos.
Medio centenar de padres de familia y vecinos de la Universidad Pública de El Alto (Upea), ciudad vecina de La Paz, se manifestaron en puertas del pabellón de la carrera de Administración de Empresas, sitio donde ocurrió la tragedia.
Pancartas en las rejas de la universidad con rótulos de «justicia ¡ya!» o la exigencia del cierre del centro de estudiantes de esa carrera se combinaron con una pequeña capilla improvisada en la que se prendieron velas y se pusieron algunas flores en memoria de los fallecidos.
«Que se cierre este nido de corrupción», dijo a Efe Emma Cahuaya, madre de un universitario que asistió a la asamblea estudiantil que se cree fue una de las causas del trágico accidente.
«Hay jóvenes que han visto (la caída) y están traumados» porque, incluso, cuando uno de ellos impactó contra el piso logro pararse para morir momentos después, relató la mujer.
La molestia del grupo de padres es por el modo en que el centro de estudiantes presionó para que los universitarios asistieran a ese congreso mediante llamadas, amenazas de multas que llegan a unos 8 dólares si no participaban, además, de propinarles golpes en caso de llegar tarde