Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, pidió a los adultos mayores vacunarse contra el COVID-19.
En la conferencia matutina de este lunes, López Obrador dejó en claro que está demostrado que la aplicación de estas vacunas es seguro para la población, aunque recalcó que no es obligatorio inmunizarse.
“Está demostrado que estas vacunas no son un peligro, no hay riesgo, si acaso alguna reacción menor y que tengan confianza porque se les protege y es muy importante que se vacunen. No los vacunaríamos si supiéramos; son libres, es voluntario, no es obligatorio”, refirió.
Ayer, México recibió un cargamento de casi un millón de vacunas contra COVID-19 de AstraZeneca, con el que podrá iniciar a partir de hoy la inmunización de adultos mayores de 60 años.
Desde que arrancaron las primeras inoculaciones la pasada Nochebuena, el plan de vacunación no vivía una fecha clave hasta este domingo, cuando la llegada de 870 mil dosis de AstraZeneca marcó el inicio de la inmunización de los ancianos.
El Gobierno de México arrancó la vacunación de mayores de 60 años en 333 municipios de los 32 estados del país, priorizando los pueblos más pobres.
El Ejército mexicano comenzó a distribuir las vacunas, de las cuales solo 87 mil 257 se quedaron en la Ciudad de México, mientras que el resto se enviaron a los estados a través de ocho rutas aéreas.
Aunque todavía son pocas las dosis de que dispone México, López Obrador se mostró convencido que los próximos envíos programados permitirán haber vacunado con la primera dosis a los 15.7 millones de mexicanos mayores de 60 años a mediados de abril.
La vacunación de este segmento de la población es una meta clave, pues el gobierno calcula que ello permitiría reducir un 80 por ciento la mortalidad de la pandemia en México, donde han muerto más de 173 mil personas por COVID-19.