El actor Christopher Plummer, protagonista del mítico musical “The Sound of Music” junto a Julie Andrews, murió este viernes a los 91 años en su casa de Connecticut (EE.UU.), confirmó su familia.
“Chris era un hombre extraordinario que amaba y respetaba profundamente su profesión con excelentes modales a la antigua, un humor crítico y musicalidad en sus palabras. Era un tesoro nacional profundamente orgulloso de sus raíces canadienses”, escribió su amigo y representante Lou Pitt al diario especializado Deadline.
Plummer continuó trabajando hasta cumplir los 90 años, con 82 años se convirtió en el galardonado más longevo en llevarse un Óscar por su trabajo en “Beginner” (2012) y recientemente trabajó con Ridley Scott en “All the Money in the World” (2018).
El gran público reconocerá su imagen porque está estrechamente ligada a uno de los musicales más celebrados de Hollywood, “The Sound of Music” (1965), en el que interpretó al rígido pero entrañable padre de la familia Von Trapp, cuyo corazón se ablandaba con la llegada de Julie Andrews.
Antes de recibir ese papel, que terminó de catapultar su fama, Plummer participó en otra superproducción de la talla de “The Fall of the Roman Empire” (1964), cuyo rodaje se llevó a cabo en varias regiones de España.
Plummer, nacido en Quebec (Canadá) en 1929, destacó por su presencia teatral ante las cámaras, labrada en los escenarios de Broadway, donde también se llevó dos premios Tony, el máximo galardón del circuito teatral.
Pero sus mayores reconocimientos en la gran pantalla llegaron al final de su carrera y desde el año 2009 acumuló tres nominaciones al Óscar, otras tres a los Globos de Oro y dos del Sindicato de Actores de Hollywood.
Hizo triplete en 2012 al ganar todos los premios por “Beginners” cuando tenía 82 años. Se convirtió en el actor más longevo de la historia que subía al escenario a recoger un Óscar.
Tiempo después volvería a recibir halagos por sustituir de manera impecable a Kevin Spacey, expulsado por las acusaciones de abuso sexual, en “All the Money in the World” (2018) bajo los mandos de un Ridley Scott que le hizo repetir todas las escenas filmadas por Spacey en tiempo récord.
“Solo teníamos nueve días para rodar y tuve el guion solo dos días antes del rodaje. Así que no hubo mucho tiempo para la introspección o para largos debates”, señaló entonces en un encuentro al que asistió Efe el desaparecido intérprete.