A bordo de una suburban blanca, el exgobernador de Puebla, Mario Marín Torres, ingresó pasada la medianoche a la cárcel de Cancún y, horas más tarde, será presentado ante el Juzgado Segundo de Distrito, para enfrentar cargos por la autoría intelectual de la tortura en agravio de la periodista, Lydia Cacho Ribeiro.
Prófugo durante un año y 10 meses, el exmandatario estatal fue detenido ayer en un domicilio ubicado en Acapulco, Guerrero, por elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), quienes cumplimentaron la orden de aprehensión librada en diciembre pasado por el Primer Tribunal Unitario del Vigésimo Séptimo Circuito, radicado en Cancún.A las 12:53 horas -de Quintana Roo- el político, amigo del empresario Kamel Nacif -también prófugo- ingresó en segundos al Centro de Readaptación Social, a bordo de una suburban blanca, con placas T-39-ACT, seguida de otras cuatro camionetas que se estacionaron en el exterior del inmueble.
De acuerdo con Aracely Andrade, abogada de la escritora de “Los Demonios del Edén”, en las próximas horas Marín Torres será presentado ante el Juzgado Segundo de Distrito, que habrá de resolver si se le dicta o no el auto de formal prisión por el delito de tortura, en agravio de Cacho Ribeiro.
La periodista es también víctima de desplazamiento forzado desde julio de 2019, cuando un par de sujetos allanó su casa, asesinó a sus dos perras, revolvió sus pertenencias y robó material de trabajo “altamente sensible”, acción que fue interpretada por sus asesores en seguridad, como un claro mensaje sobre el nivel de riesgo que corría la activista.