El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, aprovechó el aniversario del comienzo de la lucha contra la pandemia de COVID-19 para subrayar que el coronavirus sacudió el mundo pero al mismo tiempo generó la mayor respuesta sanitaria de la historia.
“Una nueva amenaza global emergió hace un año, cuando la gente celebraba la Nochevieja, y desde entonces la pandemia se ha llevado muchas vidas y ha roto familias, sociedades y economías en todo el mundo, pero también desató la más rápida y extensa respuesta sanitaria en la historia de la humanidad”, señaló en un mensaje para recordar el aniversario y al mismo tiempo felicitar el año nuevo.
Esa movilización se ha traducido en “una incomparable movilización de la ciencia” y “actos de solidaridad, grandes y pequeños” en los que los trabajadores sanitarios fueron grandes protagonistas, indicó Tedros en el mensaje de vídeo.
El experto etíope también recordó la velocidad récord a la que se han desarrollado vacunas, tratamientos y diagnósticos para luchar contra la Covid-19, algo en lo que la OMS colaboró con la iniciativa Acelerador ACT, en la que los países miembros de la organización hicieron donaciones millonarias para financiar investigaciones.
En este sentido, el director general recordó que, dentro de ese programa, la OMS requiere aún más de 4.000 millones de dólares para adquirir vacunas anticovid en 2021 y distribuirlas a países en desarrollo.
“Las vacunas ofrecen gran esperanza para que haya un giro de 180 grados en la pandemia, pero para proteger el mundo debemos asegurarnos de que toda la población en riesgo esté inmunizada, no sólo la de países que pueden permitirse la adquisición de dosis”, indicó.
Tedros subrayó que “2020 ha dado lecciones y toques de atención que debemos considerar en 2021”, como la necesidad de incrementar la inversión de todos los países en sanidad pública, con el fin de que “nuestros trabajadores sanitarios estén preparados para prevenir y responder las pandemias que inevitablemente traerá el futuro”.
Aconsejó además que mientras las campañas de vacunación contra el coronavirus se desarrollan, algo que tomará un tiempo, hay que seguir con los métodos que las sociedades utilizaron en 2020 para combatir el virus.
“Ello significa mantener la distancia física, llevar mascarilla, cuidar la higiene de manos, evitar lugares concurridos en interiores y tratar de quedar con los demás al aire libre”, recordó el experto.
Tedros también exhortó a mantener la solidaridad global que generó la pandemia y evitar las divisiones políticas que también provocó la crisis sanitaria, “pues alimentan al coronavirus”.
En 2021 “tenemos la opción de ignorar las lecciones de 2020 y permitir que perduren las teorías de la conspiración y los ataques a la ciencia, lo que resultaría en sufrimiento innecesario para la salud de personas y sociedades, o trabajar juntos en los últimos metros hacia el final de la crisis”, declaró.
“La elección es fácil: hay luz al final del túnel, y llegaremos allí caminando juntos”, concluyó Tedros.
El 31 de diciembre de 2019, las autoridades chinas informaban a la OMS de la aparición de casos de una enfermedad neumónica entonces desconocida en la ciudad de Wuhan, y la organización con sede en Ginebra informaba de ello a sus miembros en los primeros días de enero.
Un mes después, el 30 de enero, el organismo declaraba una emergencia internacional por el coronavirus, al empezar a declararse casos en otros países del planeta, aunque no consideraría la crisis sanitaria una pandemia propiamente dicha hasta el 11 de marzo.