*Inaceptables las Mentiras y los Engaños por la Pandemia
*Además, el Manejo Deficiente, Caprichoso y Arbitrario
*Injustificables sus Resultados, más Bien son Catastróficos
*Sin Pavimentar una vía Para Enfrentar el Porvenir
*El Pódium: Para Desacreditar, Denostar y Calificar a Opositores
Por Alejandro Zapata Perogordo
Si la intención fuese mejorar la calidad de vida de los mexicanos, cuestión puesta en duda, la realidad como resultado de la gestión, nos coloca exactamente en el rumbo contrario, las acciones implementadas arrojan resultados negativos con escenarios desalentadores.
Es comprensible advertir que la crisis sanitaria proviene de una eventualidad imprevisible con efectos en diversas áreas, sin embargo, lo que es inaceptable son las mentiras, los engaños y el manejo deficiente, caprichoso y arbitrario que le han dado a la contingencia, como también son injustificables sus resultados: catastróficos.
Las palabras mágicas para esconder la ineptitud consisten en distribuir culpas al pasado, no obstante, sin dejar de reconocer los excesos heredados, esa explicación recurrente no otorga solución a los problemas presentes, como tampoco pavimenta una vía para enfrentar el porvenir, más se orienta al campo de los pretextos y distractores para evitar responder sobre su malograda gestión.
Ese es el caso de la famosa consulta, un ejercicio ocioso e inconstitucional, ya que, si existen actos ilícitos atribuibles a los expresidentes, su obligación es presentar las denuncias y las pruebas, en cambio opta por el linchamiento público con evidentes sesgos electorales, utiliza el pódium presidencialista con el objeto de desacreditar a sus adversarios políticos, denostarlos, señalarlos como delincuentes y culpables de todos los males, son actos inclusive de venganza.
Cabe añadir, que la institución presidencial merece respeto y no debe ser utilizada a contentillo, sin embargo el video filmado en su rancho haciendo mofa directa en relación a la negativa del registro como Partido Político de México Libre, envía un mensaje brutal, en principio de intolerancia a la participación de institutos políticos contrarios a su administración; deja entrever su influencia ante el INE, salpicando al órgano. Además lejos de pugnar por la pluralidad y unidad nacional, invoca la fragmentación social, induce a los rencores e incursiona desde la presidencia a tomar partido en cuestiones de carácter meramente electoral, trastocando los más elementales principios democráticos que debe observar el primer mandatario de la nación: la imparcialidad.
El tema de la seguridad es un verdadero fiasco, su compromiso de poner orden en seis meses se equipara a las prospectivas de su vocero López-Gatell, incumplido y va para largo.
Los acontecimientos suscitados en la presa La Boquilla en Chihuahua, fueron manejados de la peor manera, como se dice en mi tierra con las patas y, por si fuera poco, avientan a la Unidad de Inteligencia Financiera a congelar las cuentas bancarias, en vez de usar el arma más importante y efectiva en los conflictos sociales que es el dialogo y buscar el entendimiento, se van a echarle leña verde al fuego: inconcebible.
Y así, sucesivamente, el endurecimiento del régimen pasa por el presupuesto de egresos y la economía. El documento presentado a la Cámara de Diputados es una verdadera joya histórica, viven en otro mundo, disfrazan las cifras y prevén escenarios utópicos; con gran facilidad y mucho cinismo utilizan la demagogia planteando un panorama sostenido en cifras alegres, motivaciones, frases y afirmaciones imposibles de cumplir, en su momento saldrá nuevamente la justificación con el pretexto de ser culpa del pasado, mientras tanto, el pueblo sabio y bueno seguirá padeciendo las inclemencias del tiempo y la incapacidad gubernamental para construir un México mejor, prometieron de todo y solo hemos recibido engaños.
