El británico Lee Kerslake, que fue batería de Ozzy Osbourne y Uriah Heep, murió esta madrugada a los 73 años a consecuencia de un cáncer de próstata, según confirmó este sábado uno de sus compañeros.
Al legendario músico se le diagnosticó por primera vez la enfermedad en 2015 y esta reapareció en 2018, cuando él mismo reveló que se había extendido a otros órganos y que se encontraba en estado terminal.
“Es con la mayor de las congojas que comparto con ustedes que Lee Kerslake, mi amigo desde hace 55 años y el mejor batería con el que he tocado, perdió su batalla contra el cáncer a las 3.30 de esta madrugada”, comunicó hoy Ken Hensley, uno de los miembros de Uriah Heep, en un mensaje a los medios.
Con el grupo de Ozzy Osbourne, Kerslake tocó en 1980 y 1981 en los dos primeros álbumes de la banda, “Blizzard Of Ozz” y “Diary Of a Madam”, además de contribuir a un álbum en directo en 1987, “Tribute Live Album”.