Hay reunión cumbre, entre gobernadores y el presidente de la República. La tercera en los 21 meses del actual gobierno y calificada por muchos como “urgente” si se pretenden limar diferencias entre mandatarios estatales y el titular del Ejecutivo.
Pero como se trata de echar montón (o a lo mejor con buena suerte de resolver problemas) esta vez y por primera ocasión en la historia de la Conago, acudirán los 21 titulares que integran el actual gabinete presidencial y los cinco del gabinete ampliado.
Ya era. Las confrontaciones no han cesado y en cambio han menudeado los rechazos, los epítetos, los ninguneos y la minimización de los problemas, hasta llegar a la exhibición de presunta corrupción de algunos empleados de mandatarios de Acción Nacional.
Como fuere considero que es una gran oportunidad para reducir la pésima relación entre las partes, en momentos en los cuales México y los mexicanos requieren de la unidad de acción por lo menos en los cuatro fundamentales problemas del país: el sanitario, debido a la pandemia y la falta de medicamentos; el económico, tras la caída de la economía, el desplome del PIB y la debacle petrolera; el desempleo, que afecta a más de un millón de trabajadores y el aumento de la pobreza, entre otros.
No es pues momento de discolerías y absurdas venganzas. Con motivo de la reunión en puerta, penas ayer los diez gobernadores de la Alianza Federalista conformada por los de: Jalisco, Guanajuato, Nuevo León, Aguascalientes, Michoacán, Tamaulipas, Colima, Coahuila, Durango y Chihuahua, establecieron cuatro puntos fundamentales a tratar: salud, económico, hacendario y energético. Que sea para bien.
A estas alturas no hay nada que no sea prioritario, pero la reactivación económica es urgente, así como la toma de conciencia del gobierno federal de que debe concluir la entrega de dinero con fines políticos a ciertos grupos, o de otra manera no habrá recursos que alcancen para todo lo que es urgente.
Apenas el pasado 13 de julio se cumplieron 18 años de que se constituyó la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) impulsada e integrada por mandatarios estatales de los partidos PRI y PRD y en 2003 se unieron también los del PAN, año en el cual de plano ingresaron aquellos gobernantes de las entidades de todos los partidos.
Su principal cometido era la defensa de un federalismo incluyente, con distribución justa de los recursos, por lo que en la actualidad, cuando hay dudas acerca de que se esté respetando el Pacto Federal, urge que en esa cumbre se tomen acuerdos.
Desde la creación de la Conago han sido cuatro los presidentes de la República que han sostenido reuniones con los mandatarios estatales:
Por ejemplo, Vicente Fox Quesada se reunió con ellos en 4 ocasiones en Guanajuato, San Luis Potosí, Coahuila e Ixtapan de la Sal.
Felipe Calderón Hinojosa 5 veces, en Nuevo Vallarta, Tlaxcala, Puerto Vallarta, Manzanillo y Campeche.
Enrique Peña Nieto por su parte, fue quien se reunió el mayor número de ocasiones con los mandatarios, 12 veces, en Mazatlán, Puebla, Aguascalientes, Durango, Tlaxcala, Toluca, Bahía de Huatulco, Jojutla, Ciudad de México (dos veces) y Villahermosa.
Con Andrés Manuel López Obrador ha habido dos previas en La Paz, Baja California Sur y en la Ciudad de México. La de mañana sería la tercera. Se efectuará en San Luis Potosí.
Esta reunión puede ser muy benéfica también para el Ejecutivo, siempre y cuando deje de aplicar sus rechazos hacia los mandatarios integrantes de algunos partidos de la oposición.
Hoy, cuando la peor crisis amenaza a México por diversos flancos, es bienvenida esta reunión y en general hay un clima de apoyo para los 31 personajes, de los cuales 11 son del PRI; 9 del PAN; 6 de Morena; 2 del PRD, uno de Movimiento Ciudadano, uno del Partido Encuentro Social, un independiente y un sustituto.
La mayoría son varones. Hay sólo dos mujeres. Se trata de las dos Claudias, una es Pavlovich, de Sonora y la otra Sheinbaum, de la Ciudad de México.
Buena suerte para todos.