Por Alberto F. Mena Mallen
Recibimos por primera ocasión, despuès de varios meses encerrados, a mi hija; “es que ya estamos hartos de estar enclaustrados sin poder hacer nada”. Lo anterior fue dicho por un vecino que nos lo comentó cuando despedía de su casa a sus familiares, -padre, esposa y 3 hijos-, y agregò: “Los invité mañana a comer y no me importa ya que estamos cansados de estar encerrados y la próxima semana haré lo mismo con mi otro hijo y su famila”, repitiò.
Este personaje mencionado tiene aproximadamente 70 años y vive solo con su esposa que padece alguna enfermedad; es músico y se quejó de que no ha podido ir a las iglesias –hace unos cuatro meses-, donde toca el órgano y menos a algunos municipios del Estado de México donde hace lo mismo, acompañado de algunos coros que él capacita.
Es jubilado, así que su trabajo como él lo llama, es extra y lo usa como esparcimiento.
Y asì como actuó este vecino, lo han hecho varios en la cuadra donde vivimos; muchos actúan como si no hubiera una pandemia que mata a cualquiera. Algunos andan sin tapabocas, otros la portan en la garganta, unos mas sírespetan las medidas dictadas por las autoridades, incluso anoche se escuchó música de una fiesta que se realizó hasta altas horas de la noche. Y no importa que en pláticas se enteren de que hay amigos o familiares contagiados por el Covid-19 y que algunos o muchos mueran.
La vida, en la nueva normalidad como se le ha denominado, sigue como si nada. Los vecinos actuan como si todo fuera normal como antes de la pandemia, como si a López- Gatell no le hicieran caso, cuando el presidente López Obrador, lo ensalza hasta las nubes como todo un profesional en su trabajo, lo que no hay que dudar, pero el hecho de que no sea congruente en muchas cosas, como en las cifras y decisiones, ademàs del alarmismo de la prensa amarillista, como la califica el jefe del ejecutivo, la gente común, el pueblo feliz, feliz, ya no le cree al vocero de la pandemia ni al presidente, ya muchos ni sintonizan su show televisivo.
Comentan que ha cometido diversas pifias que se han convertido en resúmenes de información visual y escrita que circulan por las redes sociales, donde enlistan fechas y dichos de los errores que ha cometido, al igual que lo ha hecho Andrés Manuel, como fue cuando invitó a los ciudadanos a realizar su vida normal, a pesar de que los contagios estaban o estan en su máximo esplendor. La autoridad que deberían de tener, se derrumba por sus posturas frente a la pandemia y luego señalan que es la prensa quien inventa todo lo que dicen.
Y no solo la prensa amarillista y “fifi” son las que enumeran todos los dislates que se cometen desde el Ejecutivo Federal, -que para ellos son avances-, y que se argumenta en la 4T que son ataques al propio presidente, pero hay tambièn académicos, aunque no los que a diario comentan en los medios de informaciòn, como aconteció con Laurie Ann Ximenez Fyvie, Jefa del laboratorio de genetica molecular de la UNAM.
Ella, a través de una entrevista en televisión, molesta, incluso enojada, enumeró, con cifras, todas las tropelías que se han cometido con lo de la pandemia. Por ejemplo, aseguró que ella no es la ùnica confundida con las cifras que a diario emite López-Gatell en sus conferencias de prensa. Hay subregistro de datos y somos el quinto sitio a nivel mundial de los paises que han manejado peor la pandemia, destacó. Nada es normal, porque todo se pudo haber evitado con una mejor planeación y con recursos que no se dieron al sector salud; los argumentos se caen.
Si hablamos, dijo la investigadora, en términos de población para no especular, con el indice de letalidad que corresponde a los 30 paìses mas poblados, estamos en el cuarto lugar y si consideramos a los 20 paìses mas poblados, somos el pais numero uno en esa cifra; si hablamos de muertes, de los 30 paises mas poblados ocupamos el septimo lugar y si nos vamos a los 20 paises màs poblados estamos en el tercer lugar.
Tenemos el lugar número 13 en las cifras de casos de los 30 paìses màs poblados y si vemos los números en los 20 paìses más poblados ocupamos el septimo lugar. Asì, agregó, por donde se le vea, las cosas están muy mal. Ahora, lo único que les falta por analizar sería el número de confrencias de prensa que han tenido.
Y si la ocupación hospitalaria estuviera directamente relacionada con la disminución de defunciones, sería un buen indicador. Y la unica variable de éxito, será el número de defunciones que se tengan con el tiempo.
Asimismo, se refirió a la estrategia de aplicar la llamada inmunidad de rebaño corroborada por el doctor Alomía, el pasado 30 de junio.
Para ello habría que esperar a que se contagie por lo menos el 70 por ciento de la población, si somos 129 millones de habitantes, cuando menos se deberá infectar 88.9 millones de habitantes y de ellos 13.3 millones habría que hospitalizar e implicaría mas de 3.5 millones de muertos.
Merece un analisis serio, si es que a eso le están tirando, apuntò la acadèmica. Y volviò a la carga, al referirse a la hospitalizaciòn y señalar que dicen hay muchas camas y equipo de respiradores, y que no hay saturaciòn cuando la gente se muere en su casa o en cualqjuie sitio, además, en los hospitales, donde llegan las personas ya en última fase de contagio, también se mueren, por lo que lo conveniente es la prevención y la mejor manera es usando el cubrebocas, lo que se solicitó a la población tardíamente.
Hizo una comparación al indicar que es como cuando uno maneja o va en un auto, se tiene que poner el cinturón a fuezas, no es que uno no quiera, es para prevenir y para salvar vidas, pero no lo hacen con el cubrebocas. Igualmente, cuando anda uno tomado y quiere manejar, no se puede o no se debe por lo que la autoridad busca evitarlo para salvar vidas, hay sanciones y eso no lo hicieron con el cubrebocas argumentando que la población tiene libertad, como lo afirma el presidente.
Adem+as, no se puede decir que hay suficientes camas, tampoco decir que se salvan vidas aunque es lo unico que importa, concluyò.
El presidente, al tener otros datos, pide a la poblaciòn que utilice su libertad para decidir si se mantiene o no en casa, si utiliza tapabocas o si mantiene una sana distancia, aunque en su ultimo mensaje le pidio a los mexicanos que sean conscientes de que eso es lo que disminuirá los contagios que, según él van descendiendo y que sólo en 7 estados del paìs hay cifras que no han disminuido. Hay muchas contradicciones.
fermallen@gmail.com