La mirada en 2021 dominó el mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador, con motivo del segundo aniversario de su triunfo en las urnas. Hizo un balance de lo que él considera sus logros de gobierno y soslayó los temas que le han generado críticas de sus adversarios.
De cara a las próximas elecciones, López Obrador insistió en que se convertirá en el guardián de los votos, debido a que aún existe la tentación de los fraudes electorales como los que, dijo, se tuvieron en el pasado reciente.
Al dejar de lado los mítines multitudinarios con sus seguidores a causa de la emergencia sanitaria por el coronavirus y limitarse a estar sólo con su gabinete legal y ampliado en el Museo de Sitio Recinto Parlamentario en el Palacio Nacional, López Obrador afirmó que se deben cumplir con los principios democráticos, sin dejar de respetar las decisiones de lo órganos electorales autónomos como el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), pero sentenció: “vamos a estar todos atentos para que las elecciones sean verdaderamente libres y limpias”.
Recordó que cuando expuso su “compromiso por la democracia”, algunos “se molestaron y empezaron a vociferar que eso era intromisión e injerencia, pero se olvidan de que la democracia implica en primer lugar, el respeto al mandato del pueblo”.
Recordó que desde que asumió la Presidencia de la República en el 2018 dejó claro que no habría de incurrir en lo que denominó “acciones abyectas”, que “observaríamos una estricta imparcialidad partidista y que respetaríamos los resultados electorales de cualquier signo, pero también reitero, que actuemos denunciado sin titubeos y con firmeza, cualquier intento de fraude electoral”. Además, consideró que «nunca se había insultado tanto a un Presidente de la República» y que su respuesta ha sido la tolerancia y la no censura.
En este mensaje de tan solo 50 minutos y denominado “Segundo año del triunfo histórico democrático del pueblo de México”, el jefe del Ejecutivo hizo un balance de los temas importantes en su gobierno. Dedicó varios minutos al tema de la seguridad y ofreció una batería de cifras en las que se redujeron los robos, secuestros y otros delitos. Sin embargo, omitió exponer que en su sexenio han sido asesinadas 53 mil 628 personas en todo el país lo que lleva a un promedio cercano a 100 personas por día. De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), de diciembre de 2018 a mayo de 2020 han muerto cerca de seis mil mujeres y más de mil menores de edad.
López Obrador destacó que lo más importante de su estrategia en materia de seguriad es atender las demandas de los más pobres y marginados, «en el entendido de que la paz es fruto de la justicia».
Aseveró que en los casi dos años de su gobierno, gracias al trabajo, perseverancia, honestidad y justicia, se ha mantenido “la gobernabilidad en el país, la paz y la tranquilidad”. El tabasqueño no dijo nada sobre la crisis en Guanajuato. Detalló que a pesar de la crisis económica por la pandemia del Covid-19, las tiendas de autoservicio se incrementaron en 59 mil millones de pesos.
Andrés Manuel López Obrador acotó que se “tocó fondo” en la pérdida de empleos a causa del Covid, ya que en abril se dieron de baja en el IMSS a 555 mil trabajadores, en mayo se perdieron 345 mil empleos formales y en junio, con datos preliminares 83 mil empleos., por lo que se mostró optimista.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los estragos en la actividad económica por la pandemia y las medidas de confinamiento ocasionaron la pérdida de 12.5 millones de trabajos en México,.Ante esto, López Obrador se dijo convencido de que en mes de julio, “si no aumenta el número de empleos se mantendrán los 19.5 millones de trabajadores registrados en el Seguro Social”.
En su discurso hizo mención a que la recaudación de impuestos, durante el primer semestre aumentó 53 mil 643 millones de pesos, es decir, se mantuvo igual en términos reales y subrayó la importancia que tendrá la entrada en vigor del nuevo tratado comercial México, Estados Unidos y Canadá fortaleciendo las cadenas productivas que existen en esta región, por lo que dijo la economía mexicana “se consolidará aprovechando los reacomodos que se llevan a cabo en el comercio mundial”.
El Primer Mandatario recordó que se atiende a los más pobres “no sólo por convicción y por humanismo”, sino también “lo hacemos que si destinamos recursos a los menos favorecidos, habremos de lograr que haya mayor consumo, se mejore el poder adquisitivo de mexicanos” se mejorarán las condiciones del mercado nacional y mejorará el panorama para la industria, el comercio y los servicios”.
En su mensaje, subrayó que sigue “encendida la llama de la esperanza” y que la mayoría de los mexicanos, están conscientes de que se están enfrentando momentos difíciles, pero que existe “una inquebrantable fe en la transformación política, económica, social y cultural que hemos iniciado desde abajo y entre todas y todos”.