La Ciudad de México logró ubicarse en el semáforo naranja del Covid-19 tras una reducción en la ocupación hospitalaria y es por esta razón que el Gobierno capitalino dio a conocer un plan especial para comenzar actividades en el Centro Histórico a partir del martes 30 de junio.
Lo que se busca es evitar contagios, por lo que se establecieron algunas medidas fundamentales:
Reapertura gradual y ordenada de comercio.
Habilitación y expansión de espacios peatonales.
Uso flexible de las calles orientada a la sana distancia.
Reapertura de negocios
La secretaria de Gobierno de la Ciudad de México, Rosa Icela Rodríguez Velázquez, señaló que el Centro Histórico aguarda casi 27 mil comercios y para conseguir que la reactivación de éstos sea segura, su operación debe ser del 50 por ciento, gradual, rotativa y escalonada.
Los días que podrán laborar será de lunes a sábado en un horario de 11:00 a 17:00 horas, y los domingos permanecerán cerrados. Cada semana se cambiarán los horarios.
La primera semana abrirán lunes, miércoles y viernes, los establecimientos ubicados en predios con numeración par. Los martes, jueves y sábados, los que numeración non.
Además, se reforzarán las medidas sanitarias en las instalaciones de los comercios y así poder garantizar protección a empleados y a quienes acudan al lugar.
Negocios en vía pública
Los comercios que están sobre la vía pública también serán sometidos a ciertas restricciones al fin de proteger del coronavirus a los consumidores y vendedores.
Deberán trabajar sólo dos días a la semana y en las calles que les sean designadas, por lo que establecieron tres zonas para su instalación.
En la Zona Norte, que va de Eje 1 Norte a San Ildefonso, los jueves y sábado.
En la Zona Centro, de San Ildefonso a Venustiano Carranza, los martes y viernes.
En la Zona Sur, de Venustiano Carranza a Nezahualcóyotl, los lunes y miércoles.
Los ambulantes se colocarán del lado de las aceras donde no abrieron los comercios establecidos y deberán tomar dos metros de distancia entre cada puesto, además atenderán con cubrebocas y careta, así como mantener gel antibacterial en el lugar donde están trabajando.
Otra de las actividades que se ve modificada en la zona es la circulación de automóviles, la cual será permitida de lunes a sábado de 10:00 a 18:00.
Sin embargo, el metrobús seguirá operando con normalidad y no se verá afectado por el cambio de movilidad en las calles del centro.
Además, se destinarán algunas calles del Centro Histórico para uso exclusivo de peatones y otras más que serán flexibles, lo cual significa que el espacio peatonal se ampliará el espacio hasta la mitad del arroyo vehicular.
En estas calles se prevén tres escenarios para la movilidad de autos y personas. Las calles con operación habitual que no cambian; las flexibles, en las que se ampliará el espacio peatonal hasta la mitad del actual arroyo vehicular, es decir, que se quitará un carril a los autos para el paso de personas; y las peatonales que tendrán tránsito exclusivo de personas tanto en banquetas como en espacio de arroyo vehicular. En algunas de alta demanda podrán implementarse medidas de dsificación interna.
Estas medidas de dosificación se tomarán en el caso de Madero y Corregidora, donde se priorizará el paso a las personas que sólo comprarán en los comercios del lugar.
En todos los casos de reapertura se mantendrán la siguientes medidas de manera obligatoria:
Uso de cubrebocas.
Distancia mínima entre personas de 1.5 metros.
Desinfección de superficies mínimo seis veces al día.
Filtros sanitarios para detectar personas con temperatura mayor a los 37.5 grados.
Se deberán hacer pruebas al cinco por ciento de los empleados en negocios de más de 30 personas.
El Centro Histórico, considerado el corazón comercial de la Ciudad de México, antes de la pandemia del Covid-19 confluían cerca de dos millones de personas diariamente, en su reactivación se espera que lleguen 500 mil.
En el caso del comercio en vía pública, se espera la instalación de dos mil de los seis mil puestos que habitualmente lo hacían. Las reglas para su instalación son las siguientes: Sólo se colocaran en la zona que comprende de Pino Suárez a Eje 1 Oriente y de Fray Servando a Eje 1 Norte.
Una vez que la ciudad pasó del color rojo al naranja en el semáforo epidemiológico estos son los negocios que abrirán sus puertas: comercio al menudeo (excepto aquellos que se encuentren ubicados en Plazas, Centros Comerciales y Tiendas departamentales) que tiene que recibir sólo 30% de aforo; clubes deportivos y actividades al aire libre, 30%; restaurantes y establecimientos que tienen como giro principal la venta de alimentos preparados 30% y si instalan mesas en espacios abiertos 40%; establecimientos de hospedaje 30%; tianguis, mercados sobre ruedas y bazares 30%; estéticas, peluquerías y salones de belleza 30%.
La coordinadora general de la Autoridad del Centro Histórico, Dunia Ludlow, indicó que en el Centro Histórico hay en total 27 mil unidades económicas, de las cuales en el Semáforo Rojo abrieron cerca de 6 mil y a partir del 30 de junio se sumarán 21 mil, lo que representa casi el 100 por ciento de la actividad en la zona.
