La caída del PIB de abril del 19.9 por ciento y el desplome de las exportaciones en un 56.7 por ciento en mayo reflejan el impacto de la pandemia de coronavirus en México, país que comenzó en junio una cauta reapertura y suma ya más de 200 mil contagiados y 25 mil muertos.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que la actividad económica de México cayó un 19.9 por ciento en abril de 2020 respecto al mismo mes del año anterior debido a la caída del sector industrial y de servicios por la pandemia de coronavirus.
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) es resultado de la reducción del sector secundario (29.3 por ciento) y terciario (16.4 por ciento), en tanto que avanzó el sector agrario (1.8 por ciento).
“Es una caída histórica especialmente por el sector industrial y el comercio, muy sensible al tema de las medidas sanitarias para contener la pandemia”, dijo a EFE el gerente de Análisis Económico del banco Ve por Más, Alejandro Saldaña.
Según cifras desestacionalizadas, sin factores coyunturales y de calendario, el IGAE -un indicador preliminar de distintos sectores que muestra la tendencia o dirección que la economía mexicana tendrá en el corto plazo- cayó un 17.3 por ciento respecto al mes previo producto de la caída de todos los sectores.
Mientras que el sector agrícola cayó un 6.4 por ciento, el de servicios un 14.4 por ciento y el industrial un 25.1 por ciento.
“El agropecuario tuvo una resiliencia un poco mayor y se benefició que durante el confinamiento de los hogares demandaron mayores productos básicos”, explicó Saldaña, quien indicó que no se tenía registró de una caída tan fuerte en toda la historia del IGAE, un indicador que inició en 1993.
Los datos del cuarto y quinto mes del año reflejan de lleno el efecto de la pandemia de coronavirus en México y la orden gubernamental de paralizar las actividades no esenciales durante estos dos meses.
Además, el cruce fronterizo con Estados Unidos, principal socio comercial de México, se permitió solo para el transporte de mercancías y bienes esenciales.
La paralización mundial y la compleja situación de Estados Unidos y Europa golpeó con fuerza al comercio mexicano.
Las exportaciones cayeron un 56.7 por ciento y las importaciones un 47.1 por ciento en mayo, lo que llevó a México a registrar un déficit en la balanza comercial de 3 mil 523 millones de dólares.
“Lo que nos dice la balanza comercial al caer tanto las exportaciones petroleras como las no petroleras es que hubo una debilidad económica mundial que se mantuvo vigente durante mayo”, apuntó el analista.
Mientras que las importaciones, continuó, reflejan tanto la debilidad del sector industrial como de los bienes de consumo e incluso de los bienes de capital, que van “asociados al ritmo de la inversión”.