El presidente Andrés Manuel López Obrador acudió a la antigua estación del tren de Maxcanú -construida en la década de los 40- para dar el segundo banderazo de inicio de las obras del Tren Maya.
Bajo una lluvia torrencial provocada por la depresión tropical “Tres”, el mandatario federal acudió al lugar acompañado por el gobernador del estado, Mauricio Vila, y el director del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) Rogelio Jiménez Pons.
En este municipio se dará inicio a las obras del tramo 3 del Tren Maya que correrá de Calkiní a Izamal a través de 172 kilómetros.
El jefe del Ejecutivo destacó que el inicio de este proyecto llega en un buen momento ya que permitirá reactivar la economía de la región sureste y promover la generación de empleos a través del impulso a la industria de la construcción.
“Es una obra que llega en buen momento, se va a iniciar en este tiempo que debido a la pandemia del coronavirus se requiere reactivar la economía y la mejor manera de reactivar la economía y hacerlo pronto está en la industria de la construcción”, dijo.
López Obrador destacó que este proyecto logrará unir a las antiguas ciudades mayas de Chiapas, Tabasco, Quintana Roo, Yucatán y Campeche con las ciudades coloniales y modernas que ahora tienen dichos estados.
De manera paralela, explicó el mandatario federal, se aplicarán programas de mejoramiento urbano en los municipios donde correrá el tren a la vez de la implantación de los planes Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro.
“Vienen otras acciones de apoyo al sureste en todos estos municipios del sureste; se está llevando a cabo el programa Sembrando Vida apoyando a ejidatarios para que cultiven sus tierras y al mismo tiempo que haya producción de alimentos y se siembren árboles frutales y maderables para cuidar nuestro medio ambiente”, refirió