Para el actor de origen argentino Michel Brown, el éxito de La Querida del Centauro está en su trama, que trasciende los temas del narco, para centrarse en sus protagonistas. «Cada uno de los personajes tiene un deseo muy claro, que se va tergiversando a medida que va pasando el camino», dice en entrevista cedida por Telemundo.
En la segunda temporada, que se estrena este lunes, el policía Gerardo Duarte (su personaje), tendrá un giro, adelanta Brown, quien también formó parte del elenco en la primera entrega. «Entra el personaje de Sandra Echeverría (Ana) que es una delincuente que termina moviéndolo y cambiándole el norte. Evidentemente hay personajes que están relacionados con el narcotráfico, pero me parece que lo interesante de las dos temporadas es que la trama más importante gira más en torno a la psiquis de cada personaje y al conflicto que cada uno tiene que resolver».
Brown asegura que todo el elenco trabajó a profundidad sus personajes. «A diferencia de otros proyectos, donde lo más importante es echar balas, las explosiones y escenas espectaculares, nos encontramos un grupo de actores que supimos hacer muy bien el trabajo, día a día lo gozábamos mucho, porque son personajes de la vida real», aunque, agrega, tuvieron espacio para la improvisación. «Existía una estructura de las escenas, pero nosotros tratábamos de darle vida desde el lugar del personaje y creo que eso la hace diferente.
Otro valor que destaca de la producción es que «no se tiene miedo a contar las cosas como son». Así, temas como la corrupción policial o «lo poco que cuesta una vida humana» en el entorno de la delincuencia, se abordan sin filtros. Sin embargo, asegura, «no sé si los actores buscamos transmitir un mensaje, porque hay un libreto, uno interpreta el personaje, el fin de una serie es entretener y después el público elige qué quiere ver y con qué se queda de eso».