En Estado Unidos se han identificado al menos a cuatro líderes seminaristas de los Legionarios de Cristo que cometieron abusos sexuales a niños y adolescentes, aseguró el activista Dan McNevin en entrevista con Notimex.
La agrupación religiosa, que se originó en México, tiene mayor presencia en los estados de Connecticut, Georgia y New Hampshire, por lo que tanto los integrantes de la organización como algunos ciudadanos, han procurado mantenerse atentos a lo sucedido en estas regiones, para evitar que aumente el número de víctimas.
McNevin forma parte de la Red de Sobrevivientes de Abusos por parte de Curas (SNAP, por sus siglas en inglés), y aseguró que en su país al menos 250 curas y seminaristas de la Legión actualmente trabajan en aproximadamente 100 iglesias del país.
En el caso de la Legión de Cristo los curas que eran señalados como abusadores eran desplazados a iglesias y seminarios en México, donde seguían practicando sus labores, por lo que la cifra no se ha podido precisar en su país.
Jason Berry, autor del libro “El legionario de Cristo” y “Líbranos de la tentación” apuntó en entrevista con Notimex que no existen cifras exactas sobre el número de víctimas en Estados Unidos.
El sitio web que sigue los casos de abuso sexual en la iglesia, llamado Bishop Accountability, señala que al menos el 1 por ciento de los curas de la Legión de Cristo, hasta 2013, tenían denuncias en el país por abuso sexual.
Berry señaló que en Estados Unidos, al menos los arzobispos del país, pagan enormes cantidades de dólares al total de las víctimas que han denunciado, aunque considera que no existe una respuesta única a cómo terminar los abusos sexuales en la iglesia.
Asegura que el sistema de los seminarios ha dañado a quienes pasan por ahí, al estar prohibido tener una relación pone en riesgo a los jóvenes con los que conviven y califica esto como una decisión poco sana por parte de la Iglesia católica.
El informe de Los Legionarios de Cristo apuntó que Estados Unidos e Irlanda han implementado códigos de conducta y procedimientos más estrictos para evitar abusos de menores en toda la Iglesia católica.
La información publicada por la organización admite que hay al menos 175 niños o adolescentes en el mundo que han sido víctimas de alguno de los integrantes de la agrupación religiosa y 33 curas fueron identificados como victimarios. Hasta ahora 18 siguen formando parte de la Legión.