Por Verónica V. González y Arnoldo Piñón
El emplazamiento a huelga de los controladores aéreos en contra del organismo desconcentrado Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (SENEAM) es, entre otras razones, consecuencia del hostigamiento en contra de sus dirigentes sindicales. Está en riesgo la gestión de Víctor Hernández Sandoval, director general, al tratarse de una institución estratégica para el Estado mexicano.
La acción del Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo (SNACTA), por violaciones a las condiciones laborales, es síntoma de la inestabilidad que impera en la institución, originada por decisiones de funcionarios menores, como lo son Mauro Sánchez Méndez, encargado del jurídico, y Raúl Campilla, supervisor de servicios aeronáuticos.
En un comunicado a sus agremiados, el pasado domingo 1 de diciembre, la organización sindical les hizo saber que “continúan los ataques de la administración de SENEAM hacia nuestro gremio. Las reiteradas violaciones a nuestras CGT exclusivas de los CTAS ya son un fundamento legal para emplazar a huelga, ya se lo informamos al secretario de la SCT, quien no ha dado respuesta”.
Entre otras violaciones a las condiciones generales de trabajo -equivalentes al contrato colectivo-, los controladores de tránsito aéreo se duelen de que se les retiraron todas las comisiones sindicales en junio pasado, con lo que se les afectó la gestión para atender los problemas de los trabajadores.
Las comisiones sindicales tienen sustento en la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado e incluso la Organización Internacional del Trabajo (OIT) las reconoce plenamente.
Una vez que Sánchez asumió como encargado del área jurídica del SENEAM, solicitó se validaran las licencias de controladores de Alfredo Covarrubias y Ángel Iturbe, secretario general y ex secretario general del SINACTA, en lo que parece un ajuste de cuentas.
Y es que cuando Iturbe asumió la dirigencia sindical en mayo de 2012, en una reunión planteó la posibilidad de cancelar el apoyo económico que mensualmente se le otorgaba a Sánchez. El secretario de Finanzas -en la actualidad también personal de confianza en el SENEAM- pese a que no se tomó una decisión, le suspendió el pago.
Con cierta periodicidad, los controladores deben acreditar -mediante exámenes que practica y califica el organismo- conocimientos para revalidar la licencia. Es el caso que ni Covarrubias ni Iturbe los han realizado, por lo que inexplicablemente se les modificó la forma de pago de su salario para hacerlo a través de cheque.
El objetivo del cambio en la forma de pago, era notificarles que, al no haber revalidado la licencia como controladores de tránsito aéreo, estaban dados de baja y desconocerlos como representantes sindicales de los trabajadores. Una exhibición de ignorancia mayúscula de la Ley Federal del Trabajo.
Sánchez fue designado encargado del despacho por el director del SENEAM, Víctor Hernández Sandoval, a sugerencia de su compadre de grado, Raúl Campilla, a quien previamente había ofrecido un puesto de confianza del organigrama de la institución.
Ese organismo desconcentrado es estratégico para el Estado mexicano, por la importancia de las actividades que tiene a su cargo. Es impensable una huelga, la que en caso extremo que estallara, obligaría al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador a decretar la requisa de los servicios. La gestión del director Hernández Sandoval está colocada en el ojo del huracán.
El sindicato de los controladores aéreos forma parte de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) que preside Joel Ayala Almeida, a la que se adhirieron en la gestión de Iturbe, luego que a principios del siglo Campilla escuchó el consejo de Sánchez para que se incorporaran a la naciente federación que impulsaba Elba Esther Gordillo.
Sánchez enfrenta acusaciones en los órganos internos del SENEAM y del ISSSTE al no haber tramitado la suspensión en el pago de la pensión jubilatoria de la que desde marzo de 2011 goza, para incorporarse al servicio activo en la administración pública. Pudiera haber incurrido en los delitos de fraude al salario y daño patrimonial en contra del instituto de seguridad social.
El emplazamiento a huelga fue presentado el pasado miércoles 4 de diciembre en el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje que preside el chiapaneco Plácido Humberto Morales Vázquez.
PARA LA AGENDA
Desde septiembre pasado, en el Centro Médico Nacional “20 de noviembre” del ISSSTE, a 410 trabajadores de guardias y suplencias se les adeudan sus salarios. Son 136 de enfermería, 34 de nutrición, 24 de camillera, 60 médicos, 12 de mantenimiento, 80 administrativos, 10 de ambulancias y 64 profesionales (dietistas, trabajo social, químicos y físicos). A mediados del mes pasado presionaron oír el lago, por lo que provocaron el cambio en la coordinación de recursos humanos: el maestro Isaac David Ramírez Bernal sustituyó a Gabriela Lara Rodríguez. Para el director general del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda, oportunidad que no debe desperdiciar para ordenar una investigación del nepotismo y otras irregularidades en el hospital emblema del instituto…
