Una trama con el post punk y el surgimiento del arte contemporáneo en México como telón de fondo fue elegida para abrir la edición 67 de la Muestra Internacional de Cine, que se llevará a cabo del 15 de noviembre al 2 de diciembre.
De acuerdo con su director, Esto no es Berlín se centra en la búsqueda de identidad, a través de «la historia de una amistad entre dos personajes que no entienden muy bien quiénes son, como nos pasa a todos, y que cuando más o menos lo comprenden, tienen que defenderse en un mundo bastante hostil con la identidad y sobre todo el género».
Hari Sama, quien se mostró orgulloso de abrir esta cita que, dijo, fue su primera escuela de cine, acompañó a Alejandro Pelayo, director de la Cineteca y a Nelson Carro, director de Difusión y Programación, durante el anuncio del programa de este año.
«Es de resaltar que tenemos dos películas mexicanas de directores de generaciones distantes, pero ambas muy buenas», dijo Alejandro Pelayo respecto a la cinta inaugural y a la última de Arturo Ripstein, El diablo entre las piernas, protagonizada por Sylvia Pasquel y Alejandro Suárez.
Anunció el estreno de la versión restaurada de La dolce vita, así como de la nueva entrega de Woody Allen, Un día lluvioso en Nueva York y de El joven Amhmed, de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, «que ha tenido una presencia importante en festivales, igual que Varda por Agnés, el documental de la cineasta recientemente fallecida que comenzó en la década de 1960 con la Nueva ola francesa y prácticamente desde entonces, no dejó de filmar».
Entre las 14 películas programadas, están Un día lluvioso en Nueva York , de Woody Allen, El joven Amhmed , de los hermanos Jean-Pierre y Luc Dardenne, Varda por Agnés , el documental de la cineasta francesa recientemente fallecida.
La nueva cinta de Francois Ozon, Gracias a dios , basada en un caso real de pedofilia y La odisea de los Giles , adaptación de la novela La noche de la Usina , de Eduardo Sacheri y protagonizada por Ricardo Darín.
Sobre la cinta de Ripstein, Carro destacó que el realizador presenta «un universo sórdido, decadente, exaltado por el guion de Paz Alicia Garciadiego, que lleva al extremo con dos ancianos cuyo deterioro físico no impide una pasión salvaje».
