Por Verónica V. González y Arnoldo Piñón
En la última semana de agosto la Secretaría de Hacienda, concretamente su titular, Arturo Herrera, anunció que para el 2024, las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORE) reducirán a 0.70 por ciento el cobro de comisiones por administrar las cuentas para el retiro de los trabajadores.
Lo anterior es el resultado de un acuerdo alcanzado con las administradoras, mismo que está oficializado en la resolución que la Comisión del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR) publicó el pasado 22 de agosto en el Diario Oficial de la Federación.
Desde hace varios años la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha insistido en la disminución de las comisiones que cobran las Afore para que el trabajador tenga una pensión mayor.
En México la comisión por la administración de cuentas individuales, actualmente 0.98 por ciento, es superior, hasta en 100 por ciento, respecto a las que se pagan en otros países con economías desarrolladas.
Estados Unidos es de 0.45 por ciento, en Suecia 0.50 por ciento e incluso Chile, cuyo modelo pensionario inspiró a la administración del presidente Ernesto Zedillo para el cambio del sistema de pensiones, 0.51 por ciento.
El interés por bajar las comisiones de las Afore ha sido una constante de las administraciones federales, en 2009 luego de la reforma a la Ley del Sistema de Ahorro para el Retiro, la Consar obtuvo la facultad para autorizar las comisiones cada año, como resultado, las comisiones pasaron de 1.87 por ciento en 2008 a 0.98 por ciento promedio para el sistema en su conjunto, en el presente año.
La baja en las comisiones anunciada por el titular de Hacienda tiene la intención de que, en el largo plazo, los trabajadores obtengan una pensión mayor, en aproximadamente 10 por ciento, respecto a la que recibirían si la tasa de interés se mantuviera como la actual.
Pero, este beneficio no será parejo, los trabajadores de recién ingreso, los que se jubilen después de 2050 serán favorecidos; no así quienes están cerca de pensionarse; su pensión se mantendrá raquítica, apenas el equivalente al 25 por ciento de su último sueldo.
Ciertamente la presente administración ha hecho algunas adecuaciones al sistema pensionario, hasta ahora ninguna de ellas garantizan un ingreso satisfactorio al jubilado de los próximos 10 años.
Es necesario hacer reformas a fondo para asegurar una pensión mínima que garantice al trabajador que cuando se pensione recibirá un mínimo equivalente al 75 por ciento de su último sueldo.
Las Afore aceptaron la propuesta de Hacienda, el incremento en el número de trabajadores reducirá el impacto de la baja en las comisiones; el acelerado crecimiento de los ahorros administrados por las Afore, ha permitido que, a pesar de la disminuciones de las comisiones en los últimos años, los ingresos por comisiones crecen de manera significativa.