Ignacio Fraire Zúñiga, titular de la oficina de representación del Instituto Nacional de Migración en Zacatecas señaló que de enero a julio del 2019, la autoridad migratoria en la entidad, ha repatriado a mil 560 personas, entre guatemaltecos, salvadoreños, nicaragüenses y hondureños, así como cubanos, atendiendo con los protocolos de salud, alimentación y garantizar su integridad física en coordinación con la CNDH.
Señaló Que el Programa Paisano implementado por el Gobierno Federal a través del INM tiene la obligación de brindar los 365 días del año, la atención a quien pise suelo mexicano.
El titular de la oficina de migración señaló que la economía de Zacatecas depende en gran medida de las remesas y que esta fuente de ingresos, es casi similar al presupuesto que otorga la Federación a Zacatecas del orden de los 25 mil millones de pesos.
Por otro lado, Fraire subrayó que el fenómeno migratorio en Zacatecas no se debe a la inseguridad, sino por estatus. Los pueblos se están quedando sin personas, debido a que la mayoría de los jóvenes optan por el sueño americano.
Reveló que a partir de las políticas migratorias del presidente Donald Trump han sido deportados tres mil 478 zacatecanos, la mayoría son deportados porque no tienen suficiente tiempo viviendo en Estados Unidos, de esta cifra, 60 por ciento son hombres y 40 por ciento mujeres y 20 % menores de edad no acompañados, al tiempo que destacó que radican más de 1.5 millones de paisanos en la Unión Americana.
Por lo que respecta al éxodo de migrantes, Zacatecas ocupa el tercer lugar en el país, seguido por-Michoacán y Oaxaca. Del fenómeno migratorio de la parte sur de México, de los países vecinos, informó que se les brinda todo el apoyo, porque los que ellos buscan llegar a Estados Unidos, no pretende quedarse en suelo azteca. De enero a julio del 2019, la autoridad migratoria de Zacatecas ha repatriado a mil 560 personas, entre guatemaltecos, salvadoreños, nicaragüenses y hondureños, así como cubanos.
El titular de Migración mencionó que se ha actuado con la capacidad suficiente en el Estado para atender a esta ola migratoria extraordinaria, con pleno apego a las garantías de las personas y en atención a los Derechos Humanos tanto en la estación Migratoria Central, como en la Casa del Migrante de Cieneguilla, o bien espacios alternativos que funcionaron de manera adecuada ante el éxodo masivo de migrantes centroamericanos.