La presencia de la Guardia Nacional (GN) en el Metro no es contraria a las leyes, pues está autorizada a operar en todo el país, estableció ayer Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobierno local.
Durante una entrevista, dijo que los operativos de esa corporación ha traído como consecuencia la disminución de delitos en las zonas donde patrulla, especialmente el asalto a peatón y el robo de vehículo con violencia.
En Cuajimalpa, recordó que Claudia Sheinbaum Pardo, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, ya dijo que la GN hará operativos intermitentes en las instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC), permanecerá en ellas cuando se considere necesario, pero se revisará cuidadosamente cada intervención de esa corporación federal.
A quienes cuestionan la legalidad de dicha vigilancia, la funcionaria los convocó a que le señalen cuál es el artículo violado y recalcó: hasta el momento todo se ha llevado de acuerdo a la ley y así lo vamos a seguir haciendo, es una acción preventiva básicamente.
En su oportunidad, Jesús Orta Martínez, secretario de Seguridad Pública, puntualizó que la GN es un cuerpo que está adiestrado y tiene el objetivo de combatir la delincuencia de alto impacto y no del tipo que se ve en el Metro.
Reportó que en las revisiones, los efectivos de la corporación federal no encontraron armas ni drogas en las pertenencias de los pasajeros que fueron revisados, porque simplemente hicieron filtros, recorrieron trenes y estaciones, pero el parte fue “sin novedad”.
Aseguró que la GN prácticamente no estará en el Metro durante estos días, que su presencia el martes pasado fue una situación extraordinaria, que buscan familiarizarse con las distintas regiones y tipo de rutina de la ciudadanía, pero no será algo común.
Descartó que sea algo inconstitucional, y, como lo señaló Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, son situaciones no necesarias.
Comentó que las policías Auxiliar y Bancaria Industrial son las que estén a cargo de la vigilancia y sus efectivos no están armados, porque los delitos que se cometen en el Metro son sin violencia.