*Enigmático Personaje Arriba a la Estructura del IMSS
*El Sindicato y la Impugnación del Doctor Acosta Félix
*La Gente “Nerviosa”, Incongruente y Persecutora
*Marañoso Discurso y Serie de Acciones Inmorales
Por Rafael Navarro Barrón
El instituto Mexicano del Seguro Social en Ciudad Juárez vive una de las primeras crisis derivada del cambio de gobierno federal, al incurrir la estructura de mando en actos de “influyentismo”, imposición, “amiguismo” y un abierto favorecimiento a la estructura estatal panista, violentando el principio que enarbola el presidente de la república que, por lo menos en el discurso, dice que “(nada y) nadie por encima de la ley”.
El proceso de sucesión en el hospital número 6 del IMSS (conocido como el seguro viejo), la institución más importante de esta frontera, cobró relevancia por estar dentro de la Cuarta Transformación, donde se presume que el país y su estructura de gobierno ya cambió en todos los sentidos.
El cargo de director quedó acéfalo luego de que el médico César Norberto Neave Valenzuela solicitara su jubilación. Por normatividad se esperaba que la doctora Elvia de León Olivares, subdirectora de la institución, asumiera el cargo, pero en su lugar se impuso al que menos posibilidades legales y morales tenía, el médico Sergio Javier Acosta Félix.
La tentación del nuevo delegado estatal del IMSS, Norberto Miguel Ramírez, quien tuvo un cargo similar en Sinaloa, sucumbió a la presión de los intereses que se mueven dentro de la estructura morenista.
Es allí donde la Cuarta Transformación enfrenta el conflicto de intereses, el dilema moral, la falacia de las acciones.
Por extrañas razones, desde hace varios años un enigmático personaje arribó a la estructura del Seguro Social como personal de confianza “A” (no sindicalizado). Fue colocado en un puesto “hechizo” como supervisor de hospitales, con el nivel escalafonario 56. En la pretensión de convertirlo en director del hospital del Seguro Social número 6, se le bajó al escalafón número 55, algo que es ilegal a todas luces, según lo demuestra el sindicato en las normas de operación interna de la institución.
Sergio Javier Acosta Félix ha sido ampliamente beneficiado por la posición que tuvo su hermano, Héctor Acosta Félix al interior del mismo Seguro Social cuando gobernó el PAN (Fox-Calderón).
El actual Auditor Superior del Estado fue titular del Órgano Interno de Control en el IMSS, del 2010 al 2011. Su último cargo en el gobierno federal fue con Peña Nieto. Fungió como comisionado de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, cargo que asumió en el 2014 y que dejó para convertirse en el encargado del órgano fiscalizador.
El sindicato del Seguro Social encuentra suficientes motivos para impugnar el doctor Acosta Félix. El galeno no reúne ninguno de los requisitos para ser el próximo director el hospital 6 el Seguro Social, solo cuenta con el aval del delegado.
Los voceros sindicales guardan silencios, pues encuentran en la figura del delegado y del director interior, gente “nerviosa”, incongruente y que persiguen a los que no piensan como ellos.
La Cuarta Transformación está enredada en su propio entresijo, luego de que gente adherida al sindicato del IMSS denunciara la imposición que intenta el Seguro Social. Una añorada convocatoria pudiera quedar en el simple deseo de los funcionarios del Seguro Social que aspiran al cargo de director.
La convocatoria permitiría la competencia en base al desempeño y el currículo de quienes están en los cargos de gobierno al interior del Seguro Social y son sindicalizados con licencia. La misma suerte correrá en unos meses el hospital regional del IMSS, número 66, con la inminente jubilación de su director.
El problema es el mismo, Acosta Félix aseguró que no tendría inconveniente en brincar al hospital regional número 66 como director y dejar el camino libre en la número 6.
La oposición sindical es la misma.
Antes de ser llamado como director interino, el médico Sergio Javier Acosta Félix realizaba funciones administrativas con un nombramiento hechizo, que fue creado por influyentismo político.
La Cuarta Transformación vuelve a ser un marañoso discurso y una serie de acciones inmorales, ilegales y acomodados a la conveniencia de quienes representan los intereses del presidente López Obrador.