El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, expresó hoy el desacuerdo del gobierno mexicano con la nueva medida anunciada por Estados Unidos para limitar el otorgamiento de asilo.
En conferencia de prensa, el canciller refirió que la disposición de Washington no afectará a Me?xico, que mantendrá su política en pro del refugio a quienes temen por su vida en sus países de origen.
Subrayó que este país “no coincide con medidas que limiten el acceso al asilo y refugio a aquellas personas que temen por su vida o seguridad en su país de origen por motivos de persecución”.
Estados Unidos anunció que el martes comenzará a aplicar una regulación migratoria que impedirá a solicitantes de asilo que crucen la frontera con México ser elegibles para ese amparo si antes no pidieron protección en un tercer país.
Al leer la postura de México sobre los procedimientos y criterios de elegibilidad en materia de asilo anunciados por el gobierno de Donald Trump, el funcionario acusó que la medida se tomó de forma unilateral, en el ámbito de la jurisdicción de Estados Unidos, y descartó que afecte a ciudadanos mexicanos.
Dejó claro que “México mantendrá su política de asilo y refugio como marca la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político, nuestra Constitución, los instrumentos internacionales de los que México es parte, así como la tradición histórica de nuestro país”.
El canciller dijo que el gobierno de México se mantendrá atento a las implicaciones que la decisión de Estados Unidos podría conllevar para solicitantes de asilo de otros países que ingresen a esa nación por la frontera sur o norte.
En ese sentido indicó que se prestará especial atención para que se respete el principio de no devolución reconocido por el derecho internacional vigente.
Reiteró el respeto de este país por los derechos de todas las personas, así como a sus compromisos internacionales en materia de asilo y refugio político.
Planteó que con las nuevas reglas en Estados Unidos que limitan el asilo, México no se convierte en un tercer país seguro, lo que implicaría que desde territorio nacional se tramite esta protección para un extranjero en Estados Unidos, lo cual “no va a ocurrir con esta norma”.
Explicó que el tercer país seguro es el caso de Canadá donde desde ese país algún extranjero hace el trámite para ingresar en esa calidad a Estados Unidos, que determina si la acepta o no.
Para que Me?xico sea un tercer país seguro, detalló, tendría que aprobarlo el Congreso de la Unión, y adelantó que este martes se reunirá con diputados y senadores a propia solicitud.
Más adelante dijo que hasta ahora no hay reportes de mexicanos deportados del país del norte en el marco de las redadas lanzadas por el gobierno de Trump.
Expuso que la detención, el viernes pasado, de 20 indocumentados en San Diego, California, no fue producto de las redadas que aplica el gobierno estadunidense.
“Del reporte que tengo el día de hoy, hasta esta hora, no tenemos un incremento del número de mexicanas o mexicanos detenidos en Estados Unidos ni tampoco en el de deportados o repatriados, pero eso no quiere decir que no pueda ocurrir en los próximos días”.
Informó que esta mañana se comunicó con los representantes de 50 consulados de México, así como con la embajadora de Me?xico en Estados Unidos, Martha Bárcena, quienes le indicaron que el equipo jurídico para defender a los connacionales está instalado, incluidos los consulados móviles.
Tampoco descartó que esta semana se comunique con el secretario de Estado, Mike Pompeo, o viaje a la Unión Americana para tratar el tema, aunque todo dependerá de las agendas mutuas.
Dijo que, en tanto, coordina desde el puesto de mando las acciones jurídicas que se puedan emprender y que este lunes viajó para allá el consultor jurídico y la dirección de protección consular y de protección de mexicanos en el exterior.
“Estamos listos para defender a las y los mexicanos en Estados Unidos y sus derechos”, subrayó el canciller mexicano.