El dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, consideró que la negativa del presidente Andrés Manuel López Obrador a escuchar el informe de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) 2018 no corresponde a la de un verdadero demócrata.
Señaló que al desairar el reporte, hecho que ningún mandatario había cometido en 29 años, menosprecia la función del ente autónomo contra los abusos del poder, la intolerancia y las tentaciones autoritarias.
“Es inconcebible que quien encabeza un gobierno que se dice promotor de derechos humanos no haya escuchado de frente el estado que guarda la defensa de los derechos fundamentales en México, como lo habían hecho los presidentes en 29 años consecutivos. López Obrador mostró la intolerancia de los gobiernos autoritarios”, expresó el dirigente nacional.
La Presidencia de la República se negó a recibir el informe de labores 2018 del titular de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, cuya presentación tuvo que realizarse ante el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), recordó Marko Cortés.
Destacó que desde su fundación en 1990, la labor de la CNDH ha sido fundamental como contrapeso de poder y para los miles de mexicanos que reclaman justicia, como indica el informe 2018, año en que recurrieron a la institución 77 mil 404 personas agraviadas.
Sus recomendaciones y diagnósticos, mencionó, han servido para corregir políticas públicas, y “la CNDH ha sido un acicate para los gobernantes, pese a ello, los presidentes anteriores aguantaron las críticas y los reclamos por violaciones a los derechos humanos de los ciudadanos cometidos por autoridades civiles y militares. Pero López Obrador prefirió no escuchar los reproches, probablemente porque cree que tiene mucho poder”.
Sin embargo, el presidente está muy equivocado, porque la Constitución prevé otros poderes y niveles de gobierno, así como leyes e instituciones autónomas, como la CNDH, que contribuyen a la vida democrática de los mexicanos, reiteró el líder del PAN.
En este sentido, señaló que para Acción Nacional el rumbo del país requiere de la vigencia del Estado de Derecho, del equilibrio de poderes y del respeto de los derechos humanos, así como de la inclusión, la tolerancia y la justicia.