Por Susana Vega López, (Enviada)
JOJUTLA, Mor.- Es un excelente lugar para caminar y contemplar la naturaleza; se presume como el jardín de flores más grande de México con un espacio de 51 hectáreas; su palapa de bambú es enorme y se le considera la más grande de Latinoamérica; cuenta con un foro al aire libre donde se realizan conciertos; tiene un gran laberinto con grandes esculturas: Jardines de México.
El amor y la pasión por la naturaleza se reflejan en este sitio en donde se observan flores de temporada de todos los colores; resaltan los árboles de tabachín que lucen su rojo radiante, aunque también hay de flores amarillas.
La figura de dos pavorreales, realizados con plantas, se yerguen en amplios espacios y es inevitable tomarse la selfie.
Dispone de siete jardines monumentales de diferentes estilos dotados de una gran variedad cromático-floral: el Jardín Italiano con una simetría perfecta que luce, además, blancas esculturas; el Japonés, con su pagoda abierta para contemplar los nenúfares y el lago que la rodea; el de Cactáceas con más de 200 especies de cactus y suculentas (plantas de desierto que carecen de espinas); el Jardín Tropical con sus orquídeas; el Cuatro Primaveras; el Laberinto de los Sentidos y Con Sentidos.
Con Sentidos, es un espacio adaptado para que los niños se entretengan, jueguen, aprendan y sensibilicen de la importancia de la naturaleza, con su pabellón de ADN e insectos, talleres de manualidades y más.
En días pasados, el Secretario de Turismo de la Ciudad de México, Carlos Mackinlay, asistió a Jardines de México para firmar una Carta Compromiso con esta empresa -en la que laboran 350 trabajadores- a fin de incorporarla a la oferta turística de la capital del país y de tal modo forme parte de las promociones y campañas que de manera conjunta acuerden, ya sea con banners, displays, postales, folletos y redes sociales.
En el acto oficial -en el que firmó como testigo del compromiso entre ambas instancias la Secretaria de Turismo de Morelos, Margarita González Sarabia- el director general de Jardines de México, Daniel Altafi Valladares, destacó que desde que abrió este sitio se ha recibido la visita de 600 mil personas, es decir, un promedio de entre 10 y 11 mil asistentes por mes.
Altafi Valladares informó que el lugar se ha consolidado en las preferencias de los turistas de la Ciudad de México como lo demuestra el evidente crecimiento de visitantes a este impresionante lugar de enorme atractivo, al alcanzar las 100 mil visitas de personas al año que llegan a sus instalaciones, de las cuales entre 60 y 70 por ciento provienen de la capital del país.
El directivo adelantó a Misión Política que la marca Jardines de México explora la posibilidad de abrir sucursales en otras ciudades y para ello ya se están viendo varias alternativas en otras entidades entre las que se incluye a la Ciudad de México.
Asimismo, dijo que ya están los planos para construir un hotel y que le apuestan al turismo de bodas porque es un lugar ideal para casarse, donde, por cierto, se han realizado nupcias gays.
Además, se realizan exposiciones de pinturas, conciertos, obras de teatro, la edición Dog Friendly (un día para llevar a los perros para que se diviertan para lo cual se hacen diversas actividades); vuelo de globos aerostáticos, el Festival de la Cerveza y otros atractivos.
El terreno se fue rescatando a lo largo de los años y ahora luce lleno de vegetación: hay 15 mil nuevos árboles; se producen más de 193 millones de flores al año y se han recuperado más de mil ejemplares muy cerca de la Laguna de Tequesquitengo, en el estado de Morelos.
Según los términos de la Carta Compromiso signada, también se beneficiará a aquellas personas que formen parte de alguno de los programas sociales que la Sectur CDMX opera en beneficio de los sectores de la población más vulnerables de la capital del país, previo acuerdo entre las partes.
Así, Jardines de México es una opción que combina naturaleza y arquitectura que queda a menos de dos horas de la capital del país; es ya una de las nuevas alternativas para el turismo de la Ciudad de México, tanto para sus residentes como para quienes la visitan de otros estados del interior de la República y aún para aquellos que vengan de otras naciones.
Se llega por la autopista México-Acapulco, en el kilómetro 129, en Jojutla. Se recomienda llevar zapato cómodo, ropa fresca, bloqueador solar, agua (aunque hay puntos de hidratación y de venta de jugos y líquidos en general), sombrero o sombrilla porque el sol, casi siempre, acompaña todo el trayecto de los visitantes y tiempo suficiente para dedicarse a la contemplación, a la meditación.
