El secretario de Estado estadunidense, Mike Pompeo, aseguró hoy tras reunirse con su colega ruso, Serguéi Lavrov, que ya ha llegado la hora de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, abandone el poder.
«Ha llegado la hora de que Maduro deje el poder», dijo Pompeo en una rueda de prensa conjunta con Lavrov en el balneario de Sochi, en el mar Negro.
Además, aseguró que Washington se opone terminantemente a que cualquier país se inmiscuya en los asuntos de Venezuela.
«Esperamos que el apoyo ruso a Maduro se termine», comentó, al tiempo que mencionó los grandes intereses económicos y energéticos rusos en Venezuela.
Aseguró que la postura estadunidense es que sean los venezolanos los que elijan a sus dirigentes, aunque subrayó que el país latinoamericano debe ser una democracia.
Por su parte, Lavrov replicó que «no se puede instaurar una democracia por la fuerza».
El ministro ruso acusó a EU y a Guaidó de recurrir continuamente a las amenazas de una posible intervención militar, lo que, en su opinión, «no tiene nada que ver con la democracia».
Pompeo llegó a Sochi para abordar con su homólogo la situación en Venezuela, la crisis nuclear iraní, el control de armas, el conflicto de Ucrania, entre otros temas.
Posteriormente está previsto que ambos diplomáticos se reúnan con el presidente de Rusia, Vladímir Putin.