*El Presidente Debe Moderar ya el Mensaje
*Urge Construir Nuevos Puentes con Todos los Actores
*La Política en San Luis Potosí se Calienta
Por Emilio Trinidad Zaldívar
De no bajar la delincuencia a los índices por él ofrecidos, y de no terminar con mensajes contradictorios que lejos de paliar la terrible polarización que padecemos la acrecienta, el presidente Andrés Manuel López Obrador terminará por disminuir su popularidad y con ello su bono de credibilidad que aún conserva en más de treinta millones de mexicanos.
No puede decir amor y paz, enviar mensajes evangélicos y después repetir que es la mafia del poder, la camarilla de ladrones y corruptos del neoliberalismo, los que le dejaron un país en ruinas y con el fruto podrido de años, de décadas de malos gobiernos. Si bien es cierto que quienes le antecedieron en el cargo poco o nada hicieron para cambiar el rostro violento de México, también lo es que a partir del primero de diciembre, es de él la responsabilidad de gobernar, de dar garantías de seguridad, de empleo, de salud, de educación, de una vida digna para todos.
Es Andrés Manuel López Obrador el presidente de priistas, panistas, perredistas, no solo de esas mayorías que se volcaron a las urnas por el desencanto, el enojo, la rabia, el insulto, la burla de quienes nos engañaron, que nos dijeron sacarían a México de sus diversas crisis: de credibilidad, de valores, de economías estancadas, de delincuencia imparable, de corrupción creciente, de millones en la miseria y de miles en la abundancia y opulencia.
Ya no le queda seguir culpando a los demonios del pasado de los males que aún nos aquejan. Debe dejar de descalificar, de señalar, de culpar a otros, y pasar a la construcción de nuevos puentes con todos los actores de la política para alcanzar mejores tiempos, un horizonte distinto, nuevas épocas.
Si va a continuar haciendo responsables de todo a Peña Nieto y a Calderón Hinojosa, entonces debe actuar para que paguen sus culpas, sus errores, sus excesos, pero porque el tiempo corre, debe asumir el control de los males, no solo el del Poder Legislativo y del Poder Judicial, a los que lleva de la mano.
Es claro, que en la última administración federal, el presidente y sus rufianes colaboradores, saquearon a México, lo llevaron a la ruina, pero de nada sirve que todos los días nos lo esté recordando. Que los investigue y en su caso, que la Fiscalía General de la República, los procese penalmente.
Lo que no debe seguir sucediendo, es que insista en todo acto que “los corruptos del pasado…”, y no actúe contra ellos; que exponga orondo que “nada al margen de la ley y nadie por encima de la misma”, y no respete su juramento de cumplir la constitución.
LA LUCHA POR EL PODER EN SAN LUIS POTOSÍ SE ADELANTA
Alejados del partido político que los impulsó y encumbró, el moribundo PRD, los Gallardo, Juárez y Cardona, buscan hacer que el Partido Verde Ecologista de México, logre permear en el ánimo de los electores potosinos para que a través de esas siglas puedan competir en el 2021 para arrebatarle al PRI la gubernatura del estado.
Políticos y empresarios ellos confían en que sus seguidores de la capital San Luis y la conurbada ciudad de Soledad, les darán suficientes apoyos para construir, desde ya, una candidatura sólida y competente.
El ex presidente municipal de la capital del estado, Ricardo Gallardo Juárez, que no pudo repetir en el cargo, afirma que no buscará más puestos de elección popular y que dará todo su apoyo a Ricardo Gallardo Cardona, su hijo, que hoy como diputado federal independiente, busca sumar a su causa a otros partidos políticos menores.
Uno de los suyos, Gilberto Hernández Villafuerte, alcalde por segundo periodo en Soledad de Graciano Sánchez, puede convertirse también en candidato serio a gobernador porque ha hecho una administración cercana a la gente y ha trasformado la ciudad, pero su cercanía y lealtad a los Gallardo -dicen los enterados- no le permitirán medirse para convertirse en una seria opción.
Gilberto Hernández ha sabido sumar, conciliar y con humildad y prudencia, ha venido trabajando bien con el gobernador Juan Manuel Carreras López, por lo que su gestión al frente del ayuntamiento ha caminado de manera favorable y sin tantos trompicones.
Como sea, la guerra que se avecina para lograr el gobierno del estado, la darán estos personajes en contra de Xavier Nava, Ejecutivo municipal de la capital de San Luis, quien desde esa posición y con la experiencia acumulada como diputado federal, es hoy la figura a vencer.
Por el PRI siguen sin definir o impulsar, de forma seria, figuras de cara a la sucesión estatal. Parece que a Carreras López no le corre la prisa o que ya se dan por perdidos porque hasta el momento pocos de sus colaboradores pudieran dar el salto.
Uno es el Secretario General de Gobierno, Alejandro Leal Tovías, y otro que puede crecer y sumar apoyos y seguidores, es el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Fernando Chávez, que tuvo un buen desempeño como diputado local y líder del Congreso del estado.
Hay más personajes dentro de las filas del PRI-gobierno estatal, con experiencia y posibilidades de lograr simpatías, pero eso será hasta que el gobernador decida que ya es tiempo de mover sus fichas para que vayan midiendo su popularidad o se topen con el rechazo.
Otro que valora si buscará o no, por el lado independiente, la gubernatura de San Luis Potosí, es el ex panista, empresario y abogado Jalil Chalita, que ha sido un duro crítico tanto del gobierno del estado como de los dos últimos alcaldes de la capital. Chalita es un hombre muy exitoso en el negocio hospitalario, y hasta donde me consta, ha probado tener sensibilidad, tacto y sentido común en su comportamiento político.
Apuntes Finales…
La delincuencia en nuestro país no cesa. Tabasco, Veracruz, San Luis Potosí, Michoacán y la Ciudad de México, sufren de una violencia imparable. Alfonso Durazo Montaño tiene que hacer más para que comience a sentirse ese cambio que tanto asegura se dará para abatir este flagelo… En Puebla, luego de las bravatas y berrinches de Alejandro Armenta Mier, finalmente se reunió con el candidato de Morena en presencia y compañía de Ricardo Monreal, que después del presidente, se ha convertido en la figura más poderosa de la 4T. Con este encuentro, la campaña de Luis Miguel Barbosa caminará sin mayores sobresaltos. La guerra sucia en su contra arreciará en las siguientes semanas, pero aun así se ve francamente imposible que le puedan arrebatar el triunfo. El PRI en la entidad poblana, para dar una seria batalla, debió postular al doctor Enrique Doger Guerrero, quien por mucho era la mejor carta, pero el “mal de Marín” -que en su tiempo debió postular a Blanca Alcalá-, contagió al CEN del PRI y se fueron por una opción equivocada. Por su parte el ex invencible PAN en Puebla, sin la competencia de un político experimentado y de peso como Eduardo Rivera, se ve, como el PRI, con candidatos testimoniales y como simples figuras decorativas. Qué vergüenza.
Twitter: @61emtrizal