Algunos agremiados del SITUAM han presentado información falsa o distorsionada, apostando al alargamiento del conflicto y a la desestabilización, acusaron autoridades de esa casa de estudios.
Subrayaron que las negociaciones con el sindicato deben circunscribirse al ámbito laboral y no verse enrarecidas con asuntos y posicionamientos de actores interesados en el alargamiento artificial de la huelga, que cumple 64 días.
Consideraron un deber de los universitarios procurar la salvaguarda de una institución plural y diversa, respetuosa de las libertades y las diferencias, en el marco de la honestidad, el compromiso y la entrega a sus funciones sustantivas que dan sentido al esfuerzo cotidiano de todos los integrantes de la comunidad.
En una carta dirigida a la comunidad firmada por Eduardo Peñalosa Castro, rector general; José Antonio De los Reyes, secretario general; Rodolfo René Suárez Molnar, Rodrigo Díaz Cruz, José Mariano García Garibay y Fernando de León González, rectores de las Unidades Cuajimalpa, Iztapalapa, Lerma y Xochimilco, advirtieron que el paro de labores ha generado consecuencias negativas para esta casa de estudios y siguen multiplicándose.
Apuntaron que más de 58 mil estudiantes permanecen sin clases; tres mil académicos han interrumpido sus labores de investigación y docencia; se han suspendido más de mil investigaciones y múltiples servicios a la comunidad, además de las actividades culturales programadas que no han podido efectuarse.
Recordaron que en diálogo con el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) se han alcanzado coincidencias en la gran mayoría de los temas planteados en el emplazamiento referido a los problemas de cumplimiento del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
Sin embargo, anotaron, en relación con el incremento salarial, la Universidad ha presentado la oferta más alta dentro de sus posibilidades, la cual supera las de otras instituciones similares y está por arriba del índice de inflación y el tope salarial, sin poner en riesgo la viabilidad de esta casa de estudios.
La actual gestión se ha comprometido con el fortalecimiento de la institución y es su deber salvaguardar como prioridad el presupuesto aprobado para la docencia, la investigación y la difusión de la cultura, erradicando prácticas que implican gastos onerosos, destacaron.
Esta política de racionalización en materia de puestos de trabajo y recursos económicos, advirtieron, ha afectado intereses cuyas reacciones se han puesto de manifiesto durante la huelga.
Establecieron que la Universidad no dará marcha atrás y profundizará en aquellas medidas que salvaguarden la vida institucional y el uso correcto de su patrimonio, frente a cualquier intento indebido de obtener ventajas personales a costa de la UAM, aunque ello provoque infundios en contra de sus autoridades.
En su misiva aclararon que la Casa Abierta al Tiempo cuenta con los cauces institucionales adecuados para atender cualquier inquietud de su comunidad, en particular las que pudieran señalar actos de corrupción, pues el compromiso de erradicarlos es indeclinable.
En un plazo muy corto la comunidad, en su pluralidad, tendrá como tarea primordial restablecer la vida universitaria y proyectar a la UAM como una institución al servicio de los jóvenes y la sociedad mexicana, aseveraron.