Una red de traficantes de humanos (polleros) estaría detrás del secuestro de 19 personas que fueron obligadas a bajar de un autobús el jueves pasado en Tamaulipas por un comando armado que traía una lista con nombres de las personas.
Así lo confirmó el Secretario de Seguridad y protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño al indicar que en este momento el estatus de las personas es de “desaparecidos”, lo que hace suponer a las autoridades que algún grupo delictivo que presta servicios para ayudar a pasar la frontera a los indocumentados y llevarlos a Estados Unidos estaría detrás de los hechos.
En conferencia, el funcionario federal recalco que hasta el momento los servicios de inteligencia de Nicaragua, Honduras y El Salvador señalan que no tienen ninguna denuncia oficial por la desaparición, secuestro o privación de la libertad de indocumentados en la frontera de Tamaulipas.
De acuerdo a la declaración del chofer de la unidad, el incidente ocurrió a las 12:55 horas, en el kilómetro 79 de la carretera Matamoros-Reynosa, a la altura del ejido Palos Blancos, en el municipio de San Fernando, donde cuatro vehículos le dieron alcance al autobús de pasajeros y lo interceptaron.
Cuatro hombres con armas largas bajaron de las unidades, obligaron al chofer a abrir las puertas, subieron al camión y bajaron a 19 personas sin seleccionar a los pasajeros. Sin embargo, Durazo Montaño dijo que hay otra declaración ante la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas, donde el operador señala que fueron 25 personas a las que se llevaron.
De acuerdo con el conductor, los sujetos encapuchados llevaban una lista con los nombres de las personas que se llevaron, lo que hace suponer a las autoridades que se trata de algún grupo delictivo que presta servicios para ayudar a pasar la frontera a los indocumentados y llevarlos a Estados Unidos.
Alfonso Durazo informó que se avanza en la investigación por la desaparición de dichas personas