“Estamos ante el fin de una era y debemos estar a la altura de las circunstancias’’, afirmó la dirigente Claudia Ruiz Massieu, al señalar que la reconstrucción del PRI es el primer paso para reencontrarse con la sociedad; para recuperar el terreno perdido y para volver a ganar la confianza mayoritaria del pueblo de México.
En su mensaje a la cúpula priista, a los sectores y a las organizaciones de todo el país, la presidenta del CEN del PRI destacó que en un ambiente polarizado, entre quienes plantean desmantelar las instituciones y obviar las instancias de representación, y aquéllos que tienen una visión conservadora de la realidad, el priismo se presenta como la alternativa del equilibrio y la gobernabilidad.
En ese sentido, también envió un mensaje a la militancia tricolor, al señalar que “ya hemos decidido que el camino de la renovación será por la vía de la democracia, de la participación libre y directa de la militancia. Tengo la plena confianza de que, el partido que supo construir las instituciones que garantizan la democracia y la pluralidad en el México de hoy, tendrá la madurez política para llevar a cabo un proceso interno ordenado, basado en las propuestas y no en la descalificación’’.
Durante los festejos del 90 aniversario de ese instituto político, hablo de la unidad “para renovarnos no desde el dolor ni el enojo, sino con la firmeza para buscar una reestructuración basada en el consenso y la estrategia’’.
Rechazó aquella política que construye un proyecto colectivo por sobre los intereses y visiones personales.
“El PRI representa la certeza de que se puede ser al mismo tiempo un gobierno democrático y eficiente. Un gobierno que construye acuerdos políticos desde la fuerza de las razones, no que avasalle desde la fuerza de los números’’.
Ruiz Massieu Salinas afirmó que el PRI representa la política que concilia la capacidad técnica con la sensibilidad social, que reivindica, no descalifica, el trabajo de los servidores públicos.
Con la asistencia de 386 consejeros, líderes de sectores y militancia reunida en el auditorio Plutarco Elìas Calles, la líder nacional dijo que no son enemigos, sino aliados para crear desarrollo incluyente.
“El PRI representa la política que concilia la capacidad técnica con la sensibilidad social, que reivindica, no descalifica, el trabajo de los servidores públicos’’.
Por eso, Ruiz Massieu hizo un llamado a reformar la oferta programática para plantear la alternativa de desarrollo e inclusión; de democracia y justicia social que el pueblo de México exige del partido histórico de la Revolución Mexicana.
Señaló que los ciudadanos exigen más al PRI porque, a lo largo de su historia, ha sido el gran artífice del desarrollo nacional y el depositario de las expectativas de la gente.
“Hoy, como en el pasado, nuestro partido habrá de emprender un proceso de renovación que le permita responder a los nuevos tiempos. “Porque si bien impulsamos la democracia hacia afuera, no lo hicimos al interior del partido, lo que nos hizo alejarnos de la ciudadanía y de nuestra propia militancia’’.
Como oposición, debemos hacer crítica con propuesta, defender las instituciones que le han dado estabilidad y progreso a la República, al sistema federal, la soberanía de la nación y el régimen democrático, de derechos y libertades que hemos construido, argumento en su mensaje.
Ante un auditorio expectativo, dijo que “la expresión más elevada, más genuina y más valiosa del priismo no es la dirigencia, sino la militancia”.
La militancia esta llamada a ser hoy, más que nunca, el puente entre partido y sociedad, para forjar una nueva alianza con los mexicanos, enfatizó.
Sólo desde la militancia podemos construir el partido del siglo XXI que anhelamos: un partido más abierto y democrático, más horizontal, flexible, congruente y cercano a la gente, finalizò.