Un juez federal admitió a trámite el recurso de amparo que tramitó la defensa de Florian N, en contra el proceso de extradición a Rumania que inició el gobierno mexicano.
El extranjero detenido el pasado jueves en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), es identificado como líder de la mafia rumana y cabecilla de una organización denominada “Banda de la Riviera Maya”, que alteró hasta 100 cajeros automáticos para poder robar datos de tarjetas de crédito de turistas y retirar dinero de sus cuentas.
Este lunes el titular del Juzgado Segundo de Distrito de Amparo en materia Penal, el juez Antonio González García, admitió a trámite el juicio de amparo, luego que el Juzgado Décimo de Distrito en materia Administrativa se declaró incompetente para conocer del asunto.
El impartidor de justicia informó que el ciudadano rumano ya ratificó su demanda de garantías y detalló que no se aperturó el incidente de suspensión, debido a que el 27 de mayo se le otorgó la suspensión de plano respecto de los actos tildados de inconstitucionales.
La demanda de amparo es contra de actos del Secretario de Relaciones Exteriores y otras autoridades. “Instrúyase al actuario judicial adscrito a este juzgado para que se constituya en las instalaciones del Reclusorio Preventivo Varonil Norte y lo requiera, para que en un plazo de tres días, manifieste si ratifica la demanda de amparo promovida a su favor” señala el juzgado.
El juez programó la audiencia constitucional para el 30 de junio de este año, fecha en la que resolverá si le concede la protección de la justicia federal y dio un plazo de 15 días para que las autoridades rindan sus informes respectivos.
Florián N, es requerido por un tribunal de Bucarest para ser juzgado por los delitos de delitos de delincuencia organizada, extorsión y tentativa de homicidio agravado.
Actualmente Florian, alías El Tiburón es investigado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) como presunto líder de un grupo dedicado a fraudes con tarjetas de crédito, además es requerido por el tribunal de Bucarest para ser juzgado por los delitos de intento de asesinato, chantaje y constitución de una red de delincuencia organizada.
El mes pasado, un juez federal le concedió al ciudadano rumano, suspensión provisional en contra de su extradición para efecto de que las autoridades responsables se abstengan deportarlo.
