Al menos dos personas murieron y otras 12 resultaron heridas tras un tiroteo que tuvo lugar en una fiesta que se estaba celebrando en una residencia en el condado de Cumberland, en el estado de Nueva Jersey.
Según la policía estatal, las dos víctimas mortales son un hombre de 30 años y una mujer de 25 cuyos nombres no se han hecho públicos, mientras que uno de los 12 heridos está en estado crítico.
Las fuerzas del orden de Nueva Jersey señalaron además que todas las víctimas son adultos, y que aún se están investigando los motivos del tiroteo y no se ha arrestado a nadie.
La llamada a los servicios de emergencia se produjo sobre las 23:50 h del sábado para acudir a una residencia del municipio de Fairfield, donde se encontraban más de 100 personas en una fiesta.
Imágenes tomadas desde un helicóptero a primera hora del domingo mostraban los desperdicios que habían quedado regados por el jardín de la residencia después del suceso, producto del caos que se desató después del tiroteo.
El reverendo de una iglesia situada frente a la casa aseguró a los medios locales haber escuchado varios tiros.
“Empecé a escuchar lo que al principio pensaba que eran fuegos artificiales, pero en realidad eran tiros, y escuché una sucesión rápida de nueve tiros”, dijo Michael Keene, de la Iglesia Trinity AME.
Líderes de la comunidad concretaron que se trataba de una fiesta de cumpleaños en la que los asistentes debían acudir con atuendos de los años 90, y que la mayoría de los invitados eran personas jóvenes.
“Tenemos muchos problemas en esta comunidad y hemos vivido muchas tragedias”, dijo al canal Abc7 la representante de HopeLoft Community Center, Melissa Helmbrecht.
“Si vas a una fiesta, ¿qué necesidad tienes que llevar una pistola?”, apuntó Keene. “Para mí eso significa que esperas que haya problemas”, agregó Keene.