Texas es el estado del que más armas ingresan ilícitamente a México desde Estados Unidos, con 41 por ciento del total, informó el jefe de la oficina del canciller, Fabián Medina.
El funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quien fue el encargado de realizar un análisis sobre la problemática, detalló que cada año entran a nuestro país de manera ilegal entre 250 mil y 280 mil armas, de las cuales 70 por ciento proviene de un fabricante o distribuidor estadundiense.
“En los últimos diez años suman entre 2.5 y 3 millones de armas de fuego que cruzaron ilícitamente a territorio mexicano y que están en manos de civiles (sobre todo crimen organizado)”, enfatizó Medina al participar en un foro virtual sobre el tema convocado por el consulado general de México en El Paso, Texas.
En ese estado, dijo, existen 10 mil 492 licencias para vender arsenal ligero, ocupa el número más alto en el país vecino, y entre 2011 y 2020 se celebraron además mil 130 ferias de armas.
De acuerdo con su análisis, los principales puntos de trasiego ilegal de estos productos de Texas a México son a través de El Paso, Laredo, McAllen y Brownsville.
Detalló que los gobiernos de ambos países realizan siete operativos espejo en el cruce fronterizo colindante con Texas, estos son: Ciudad Juárez-El Paso, Nuevo Laredo-Laredo, Reynosa-McAllen, Matamoros-Brownsville, Presidio-Ojinaga, Eagle Pass-Piedras Negras y Del Río-Ciudad Acuña.
Refirió que de acuerdo al Sistema Consular de Monitoreo de Armas, de abril de 2020 a enero de este año se decomisaron 332 mil 434 armas.
McAllen fue la ciudad texana con mayor número de aseguramientos, seguida de Eagle Pass, El Paso y Laredo.
Otro alto porcentaje del arsenal ilegal que ingresa a México desde el vecino del norte proviene de California, 19 por ciento, y San Diego es el principal punto de trasiego; 15 por ciento entra desde Arizona, otro estado fronterizo, el punto de mayor ingreso desde aquí es a través de Nogales; en tanto que el 25 por ciento restante proviene de otras entidades de Estados Unidos.
El funcionario señaló que gran parte de ese arsenal acaba entre las filas del crimen organizado. Datos del Small Arms Survey, México es el séptimo país del mundo con más armas de fuego en manos de civiles de formal legal e ilegal (16.8 millones). Agregó que 72 por ciento de homicidios que se cometen en México, se realizan con este tipo de armas.
La violencia armada le cuesta a México 282.1 mil millones de pesos, equivalente a 1.52 por ciento del producto interno bruto; el fenómeno también tiene un costo para Estados Unidos, dijo Medina, de alrededor de 229 mil millones de dólares.
Los datos que el funcionario presentó durante el foro muestran que a partir de 2005, la violencia generada por el tráfico de armas en México tuvo un impacto en la esperanza de vida, la cual disminuyó entre 0.5 y dos años.
En su turno, Josiah Heyman, director del Centro de Estudios Interamericanos y Fronterizos de la Universidad de Texas, en el Paso, subrayó la importancia de cambiar la visión entre los estadunidenses de que las amenazas vienen del sur hacia el norte, cuando también se dan a la inversa.
“La violencia y las armas de fuego tienen efectos trágicos en México y también en Estados Unidos. En nuestro país pensamos que éste es el lado seguro, y sí, no hay delitos violentos, pero hay mucho tráfico de armas hacia el sur y es peligroso para nosotros. Debemos entender la dimensión de este problema y rechazarlo”, enfatizó.