El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró que los diputados pospusieran para febrero la dictaminación de la reforma a la Ley del Banco de México (Banxico) para analizarla mejor, pero consideró que se exageró al afirmar que dichos cambios atentarían contra la autonomía de la institución.
“Que se analice y que se actúe en beneficio del pueblo sin perjudicar ninguna institución. Desde luego hay que respetar la autonomía de Banxico, pero tampoco exagerar”, dijo el mandatario durante su conferencia matutina de este miércoles.
Mencionó que el objetivo de la reforma, según le explicaron a él, es promover que a los migrantes que ingresan dólares al país se les paguen a un tipo de cambio más justo y con menos comisiones.
En su mensaje, llamó también a que el banco central contribuya con el crecimiento y el bienestar de la economía popular y no sólo con el control de la inflación.
“Es muy importante esa labor pero necesitamos desarrollo, necesitamos bienestar, que vean al pueblo, la economía de las familias, que no estén pensando nada más los directivos de esa institución, en los financieros y que no sean empleados de los ‘machuchones’ de las finanzas, que sean representantes de México y sobre todo del pueblo de México”, llamó.
Ayer martes, en el último día del periodo ordinario de sesiones, los diputados anunciaron que la iniciativa de reforma, aprobada en el Senadola semana pasada y que desató críticas del propio Banxico y otras instituciones financieras, se discutirá a partir de febrero de 2021.
Entre los problemas que Banxico encontró en esta iniciativa destacan que los estándares en materia de lavado de dinero se verían afectados, al aumentar el riesgo por tratarse de operaciones en efectivo, lo que podría derivar en que autoridades extranjeras restrinjan operaciones con las instituciones financieras mexicanas.
También destacó que el beneficio principal sería para quienes se dedican a actividades turísticas y quienes reciben remesas en efectivo, aunque sólo representan el 1% del total de los envíos al país.