Y 97 Años Después, Ellas Pueden Cantar Victoria

Tema Principal

*Son Mayoría en la Población de la República Mexicana

*Pero los Partidos y sus Dirigentes las Mantienen Marginadas

*Hoy, Cuando Menos Siete Mujeres Podrían ser Candidatas

*Las Instituciones Partidistas Iniciaron a Evaluar a las Competitivas

 *Los Varones se Alistan Para dar la Batalla en su Contra

Por Jesús Michel Narváez

La historia empezó a escribirse en 1923 en la lejana Mérida. Rosa María Torres se convirtió en la primera mujer en ser electa como regidora. Tuvo la aprobación del gobernador Felipe Carrillo Puerto. Debieron pasar 13 años para que otra mujer brillara en política. Aurora Meza Andraca fue designada presidenta del Consejo Municipal de Chilpancingo, Guerrero. Una década más tarde, se reconoció el derecho al voto femenino a nivel municipal. Y en 1943, finalmente se hizo justicia: las mujeres podían votar y ser votadas para cargos federales.

Sin embargo, en la historia de México ninguna fémina llegó a ser gobernadora hasta 1979. Parecía abrirse la puerta para las políticas. Cerradas durante 169 años, desde el inicio del movimiento de Independencia jamás una mujer ocupó un Palacio de Gobierno.

José López Portillo decidió que su partido, el PRI postularía a Griselda Álvarez para la gubernatura de Colima. Así lo hizo. Y ganó.

Después, Beatriz Paredes en 1987 alcanzó el triunfo en Tlaxcala. Los dos estados más pequeños del país ya tenían mujeres gobernadoras que habrían de pasar a la historia como las pioneras en ese cargo. Se vivía el mandato de Miguel de la Madrid Hurtado.

Y el reloj se detuvo. Los partidos políticos no volvieron a postular a una mujer ganadora, hasta 2004 cuando Amalia García Medina se hizo de la victoria en Zacatecas. Y siguieron más gobernadoras. En 2007, Ivonne Ortega conquistó el triunfo en Yucatán. En 2015, Claudia Pavlovich obtuvo los votos que la llevaron a convertirse, como las otras mandatarias, en la primera en Sonora. En 2018, Claudia Sheinbaum y Martha Erika Alonso se sumaron a la lista de mujeres con cargo de gobernadora, una en la Ciudad de México y la otra en Puebla. Pero la poblana solamente disfrutó de las mieles del poder por 11 días. Murió en el accidente que sufrió el helicóptero en el que viajaba con su esposo el ex gobernador de ese estado, Rafael Moreno Valle, el día menos indicado para dejar de vivir: el 24 de diciembre de 2018.

Entre las mujeres que ganaron, hubo dos mandatarias interinas o sustitutas: Dulce María Sauri Riancho, en Yucatán y Rosario Robles Berlanga. en la Ciudad de México.

UNA LUCHA QUE ESTÁN POR GANAR

Décadas y gobiernos han pasado. En total 97 años. Las mujeres emprendieron su lucha por ser consideradas iguales, no solamente en el papel Constitucional, sino en la realidad.

No obstante que en Lista Nacional de Padrón Electoral ellas tienen el 51.7 por ciento de presencia, los partidos políticos, sus dirigentes nacionales, estatales y municipales las mantienen en la marginación.

La reforma al inciso II del artículo 35 constitucional en el que se define: Poder ser votada en condiciones de paridad para todos los cargos de elección popular, teniendo las calidades que establezca la ley. El derecho de solicitar el registro de candidatos y candidatas ante la autoridad electoral corresponde a los partidos políticos, así como a los ciudadanos y las ciudadanas que soliciten su registro de manera independiente y cumplan con los requisitos, condiciones y términos que determine la legislación, obliga a la postulación de mujeres en igualdad de circunstancia que de varones.

Por ello, en el Consejo General del INE la consejera Adriana Favela recordó que la reforma conocida como de paridad en todo, fue aprobada con el respaldo de todas las fuerzas políticas, sin excluir los cargos unipersonales como son las Gubernaturas, tal como lo expresaron desde la tribuna varias legisladoras al momento de su ratificación.

Es un triunfo para ellas la reforma constitucional. Nadie podrá frenar sus aspiraciones y por obligación los partidos tendrán que postularlas no solo a senadoras, diputadas, presidentas municipales sino a gobernadoras.

La guerra la van ganando. Ya llevan batallas en su haber y avanzan hacia el frente, en donde el enemigo –el ejército de hombres- se repliega, pero se niega aceptar que las de enfrente tienen derechos que nadie les puede regatear. No ahora.

El Instituto Nacional; Electoral, en estricto apego a la norma constitucional y en uso de sus facultades aprobó el día 6 de este mes los “criterios de paridad de género que serán aplicables para las 15 elecciones de Gubernatura que habrán de celebrarse el próximo año y que obligan a los partidos políticos a postular mujeres en al menos siete entidades”.

¿A qué lleva la medida?

A que cuando menos 7 mujeres sean candidatas a los gobiernos estatales de los 15 que estarán en disputa el primer domingo de junio de 2021.

El acuerdo para los criterios no es del todo claro, porque señala lo siguiente: “…establece que tanto los partidos locales y federales, así como las coaliciones y candidaturas que se lleguen a conformar deberán atender la disposición de postular a mujeres para por lo menos la mitad de las Gubernaturas que se disputarán.

“Los partidos locales deberán postular preferentemente como candidata a una persona del género distinto a la registrada en la elección anterior; mientras que los partidos políticos locales de nueva creación deberán optar preferentemente por mujeres como candidatas a las Gubernaturas”.

No se entiende si todos los partidos deberán postular mujeres para que compitan entre sí o si están obligados a registrarlas como candidatas por separado. Si mujeres compiten con los hombres estarán en desventaja, porque tienen más saliva y tragan más pinole.

Seguramente habrá aclaraciones antes del 15 de diciembre, fecha en que cada partido político nacional y local tendrá que determinar y hacer públicos los criterios aplicables que garanticen la paridad de género en la selección de sus candidaturas.

ENCONTRAR MUJERES GANADORAS, EL TEMA

Ante los representantes de los partidos nacionales: Morena, PAN, PRI, PRD, MCV, PVEM y PT, además de los del Poder Legislativo, el Consejo General aprobó por mayoría los criterios.

¿Y qué pasó enseguida?

Las dirigencias de los partidos iniciaron a revisar con qué mujeres competitivas cuentan en sus filas, entre su militancia o incluso como adherentes, por no será una tarea fácil que los aspirantes varones, que sentían tener la candidatura en la bolsa, cedan sus espacios.

No se trata, finalmente, de querer o no acatar la decisión del INE: está tomada en el contexto constitucional.

Por la paridad de género las dirigencias nacionales, estatales y municipales están prácticamente obligadas a que en los dos cargos de mayor importancia se encuentren hombres y mujeres o mujeres y hombres. Esa medida ha sido adoptada desde hace dos décadas sin que exista una norma específica. En el PAN, por ejemplo, hay presidente y secretario general; en el Movimiento Ciudadano y en el PVEM se sigue la misma línea.

Al revisar el número de senadoras, se observa que solamente 29 forman el total de los 128 congresistas; en la Cámara de Diputados la paridad de género alcanza 49-51 a favor de los hombres.

En los gabinetes estatales sí hay mujeres pero en carteras poco visibles o cuyas decisiones no les permiten brillar con la intensidad, por ejemplo, de quien son titulares de las secretarías general, de seguridad, finanzas, educación, función pública etcétera. A ellas las nombran en Turismo y Cultura entre otros.

De ahí que quienes desde las oposiciones buscan crear alianzas para hacerle frente al proceso electoral 2021, en donde se juegan no solamente diputaciones y presidencias municipales, la renovación total de la Cámara de Diputados sino 15 gubernaturas, intenten negociar para que sean los candidatos que consideran pertinentes por tener mayor aprobación o menos negativos que otros, los que sean los abanderados.

Ahí comenzó el viacrucis. El PAN no está dispuesto a ceder Querétaro, Tamaulipas y Chihuahua y estaría tratando de retener Baja California Sur y Nayarit. En el PRI se aferran a Campeche, Sinaloa, San Luis Potosí, Colima y Sonora. Tlaxcala y Guerrero están en el filo de la navaja. El PRD quiere llevar a su abanderado en Michoacán y Nuevo León es un enigma: lo pelean el PRI y el PAN y se suma a la contienda el MC.

Hurgar entre quienes desde las filas de las mujeres podrían encabezar las boletas en 7 entidades tiene enorme complejidad.

Nadie quiere ceder lo que, presumen, por derecho les corresponde.

En las oposiciones el PAN lleva delantera por contar con el mayor número de diputados y senadores en estas legislaturas; y el PRI se juega la sobrevivencia en las 7 gubernaturas que están bajo sus siglas.

SOLO 7 DE 32

A lo largo de la historia de México solamente 7 entidades han sido gobernadas por mujeres… Las restantes 25 siempre por hombres.

Hoy la posibilidad de se duplique el número es real pero con limitantes. El Senado de la República anunció que el INE no está facultado para legislar y después de conocer el acuerdo sobre los criterios confirmó que presentaría una controversia constitucional para echar abajo la medida.

Frente a esa postura, el consejero presidente del organismo respondió: “El INE no legisla, pero sí adopta medidas afirmativas que contribuyen a concretar en los hechos el mandato constitucional de una contienda electoral en condiciones de equidad, certeza, transparencia y legalidad. Estamos dando un paso adelante para cumplir con una demanda social muy importante, la demanda de paridad y equidad”.

El tema no está agotado aunque si la controversia se presentara y la Suprema Corte de la Nación se pronunciara por desconocer el acuerdo del INE, millones de mexicanas y los cientos de ellas en cargos públicos exigirán el cumplimiento de sus derechos.

¿Quién ganará? Se valen las apuestas como aquellas que hicieron las primeras mujeres que por méritos propios abrieron el pequeño surco que hoy se ensancha para darles el poder a ellas, las que son marginadas y a quienes se les conculcan sus derechos constitucionales.

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