La Arquidiócesis de México afirmó que la violencia y la inseguridad que afectan a la Ciudad de México y al país son reflejo de problemas que no se han resuelto como la falta de educación, carencia de buenos empleos, pobreza, corrupción e impunidad.
En el editorial del semanario desde la fe, destacó que la inseguridad y la corrupción se han convertido en las dos batallas principales del nuevo gobierno y hasta ahora las acciones que se han realizado no son suficientes.
La Arquidiócesis de México resaltó que las autoridades no se pueden escudar en echar culpas a las administraciones porque eso sería escurrir el bulto del problema.
Añadió que al iniciar la Cuaresma se abre un tiempo para hacer un alto en el camino por lo que hizo un llamado a gobernantes, políticos y todas las autoridades que vigilan la seguridad para que reflexionen sobre la situación que vive el país y las acciones que se están realizando para enfrentar este flagelo.
Detrás de cada acto de violencia existe una historia que la originó y que tanto gobierno como sociedad no estamos atendiendo de manera correcta, señaló y consideró que es tiempo de actuar en unidad y encontrar el punto de reconciliación social que permita a todos trabajar en la construcción de un país.