El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que está bien de salud, pese a que padece hipertensión, y consideró que las conferencias matutinas deben seguir haciéndose de manera presencial, aunque no descartó hacer videoconferencias en caso de que la situación por el COVID-19 se complique.
“Aquí la regla es no pasar de 50 (personas en la sala) y sana distancia, cuidarnos, ya nuestros compañeros de más edad no asisten, hacen bien en cuidarse. Yo me cuido y estoy bien de salud, me tomo mis pastillas. A mí me dio un infarto y a partir de entonces tengo tratamiento médico, pero estoy bien, no tengo ningún problema de salud”, dijo.
En su conferencia de prensa matutina de este miércoles, el mandatario federal afirmó que le da tranquilidad enfrentar los problemas por anticipado, y señaló que no usa cubrebocas porque el subsecretario Hugo López-Gatell no se lo recomienda.
“He aprendido que problema que se soslaya, estalla; que, por ejemplo, para enfrentar la crisis económica ya tengo el plan, me llevó tiempo trabajar, ajustar, hablar con todos, definir cómo íbamos a rehacer el presupuesto, elaborar las iniciativas para el Congreso, definir sobre cómo dispersar los fondos para la gente”, declaró.
Además de mantener buena relación con el gobierno estadunidense para la entrada en vigor en julio próximo del Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Todo eso me tiene preocupado, el estar ahí pendiente. Yo creo que podemos seguir así si nos cuidamos, y si vemos que no debe de seguirse haciendo la conferencia de esta manera, lo que podemos hacer es reducir el número o rotarnos”, comentó.