El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) ayer se puso en marcha con el fin de garantizar servicios de salud de calidad a 69 millones de mexicanos que carecen de seguridad social y contará con un presupuesto de 40 mil millones de pesos en 2020. Para obtener el servicio, en las instituciones de salud sólo es necesario presentar credencial del Instituto Nacional Electoral, Clave Única de Registro de Población o acta de nacimiento.
El fin es que la población se mantenga sana, que no falten medicamentos, y se dará atención primaria de salud. Se buscará recuperar el sentido público del sector, que estaba siendo desmantelado y privatizado, sostuvo por medio de un video Juan Antonio Ferrer Aguilar, futuro titular del organismo.
Explicó que gradualmente se recuperarán 230 clínicas abandonadas y habrá atención para todos los padecimientos, así como medicamentos gratuitos y demás insumos para quienes lo necesiten, lo cual incluye padecimientos que generan gastos catastróficos, como el cáncer o el VIH y otros que se irán sumando.
Las personas sin seguridad social no necesitan afiliarse ni pagar cuotas para recibir atención médica y medicamentos gratuitos, precisó. Agregó que se basificará a 87 mil trabajadores, aumentará el personal sanitario hasta contar con más médicos, especialistas y enfermeras, así como equipamiento. Esto será para que cada tres mil habitantes cuenten con médico, enfermera, promotor de salud y voluntarios que provendrán de las comunidades. Apuntó que el proceso de reclutamiento ya comenzó con la convocatoria Médico del Bienestar.
Agregó que se aprovechará la experiencia de quienes laboraban bajo el Régimen Estatal de Protección Social en Salud, los cuales se podrán incorporar al equipo de Insabi. También se impulsarán Redes Integradas de Servicios de Salud para sumar esfuerzos y recursos de todas las instituciones médicas de salud, como el IMSS, Issste, Pemex, Sededna y la Armada.
A partir de ayer comenzó un nuevo esquema de coordinación con las entidades federativas para evitar la duplicidad o dispersión de plazas, permitirá ahorros y permitirá una mejor inversión de recursos para la infraestructura médica, indicó.
Añadió que se cuidará que no falten medicamentos y equipamiento de última generación, se actuará bajo el modelo de Atención Primaria en Salud y con equipos de salud para el bienestar, además de que se fortalecerá el primer nivel de atención, con énfasis en la prevención de enfermedades y la promoción de la salud.