El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió abrir represas de California para enviar agua al sur del estado para ayudar en varias zonas que quedaron devastadas por los incendios. Sin embargo, su decisión no fue eficaz y solo generó desperdicio de agua, según un análisis de la cadena ‘CNN’.
El pasado 31 de enero, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos abrió dos represas en el centro de California, con lo cual dejó escapar unos 2.200 millones de galones de agua.
Trump ordenó esa liberación con el objetivo de enviar agua al sur de California, pero varios especialistas en ingeniería hidráulica y civil han criticado la decisión del republicano.
Según Trump, esos millones de galones de agua estaban destinados a «los agricultores de todo el estado y a Los Ángeles», luego de la devastación causada por los incendios.
Sin embargo, según publica CNN, expertos coinciden en que la medida resultará en un desperdicio, toda vez que el agua recién liberada no fluirá a Los Ángeles y se está desperdiciando por haber sido liberada durante la temporada húmeda de invierno, cuando es menos necesaria.
“Estaban reteniendo agua adicional en esos embalses debido al riesgo de que hubiera un verano seco (…) Esto pone a la agricultura en riesgo de no tener suficiente agua durante los meses de verano», señaló al medio Heather Cooley, directora de investigación de Pacific Institute, la organización de políticas hídricas de California.
«Esta liberación es sumamente preocupante», agregó.
Para la experta, «no aporta ningún beneficio y pone a los agricultores de California en riesgo de sufrir limitaciones en el suministro de agua en los próximos meses».
La liberación de agua ordenada por Trump se presentó en la presa Terminus, en el lago Kaweah, y en la presa Schafer, en el lago Success, que son depósitos federales, pero las fuentes de agua de Los Ángeles están completamente separadas del sistema hídrico que abastecen los lagos Kaweah y Success, el cual fluye hacia el Valle Central.
El proyecto de agua del estado de California, explica CNN, suministra líquido desde el norte hasta el sur de California, incluido Los Ángeles. El abastecimiento de Los Ángeles proviene en parte de los embalses estatales y en parte del río Colorado.
